Search This Blog

Sunday 8 March 2009

Proposta de como Apresentar um Projeto Comunitário

Proposta de como Apresentar um Projeto Comunitário
jayme Fucs Bar



PORQUE ESSE TEMA É IMPORTANTE?

1- Escolha do seu Tema:
Porque escolheu esse tema?
Que o tema sejá relevante a realidade e as necessidades
de sua comunidade,Tnuá .
Que sejá viavel coloca-lo em pratica.
Que voce acredite na importância do tema .


QUEM SOMOS?

2- A História de sua Comunidade,Tnuá.
Quando foi Fundado?
Quem fundou?
Qual será a missāo de sua istituiçāo?
Em que cidades ou paises existimos?


QUAIS OS OBJETIVOS E METAS DO SEU PROJETO?

3- Definir os Objetivos
Para que estamos criando esse Projeto?
O Que queremos alcançar?
Quais os Ojetivos devemos alcancar?



PARA QUEM ESTAMOS PLANEJANDO O PROJETO?

4- O publico alvo.
Para quem voce está planejando essa atividade?

COMO SERA O SEU PROJETO?

5- O Projeto
Calendário ( dia,mês,ano)
As Atividades (Descrever aa atividades)
As tarefas ( como será destribuido as responsabilidades)
A metodologia ( Definir o metodo educacional aplicado)
Cronograma de tempo ( O dia a dia do projeto)
Espaço Fisico ( sala,campo,machane etc…)

QUE RECURSOS MATERIAS SERÁ NECESSÁRIO PARA REALIZARMOS ESSE PROJETO?

6- Recursos Materias
Profissionais/ humanos
Didáticos
Artisticos
Material

ONDE SERÁ REALIZADO O SEU PROJETO?

7- Localizaçāo Geografica
No Campo,Na Escola,Na tnuá
Em Outro Estado,Pais
Distânçia
( se for forá da instituiçāo descrever o lugar)



COMO SERA DIVULGADO O MEU PROJETO?

8- Divulgaçāo
Propaganda
Tipo de meio de comunicaçāo


QUANTO VAI CUSTAR ESSE PROJETO?

9- Custos/Lucro ou prejuizos
Quanto custará para realizarmos esse projeto?
Se temos instituições que nos apoia?
Se temos perigo de termos prejuizo?


* Bibliografia e Material Pesquisado:
Os livros, as revistas, os documentos e fotos pesquisado.

· Capa do Projeto:

Simbolo da Instituição, Tema do Projeto,Nome dos Participantes, Ano

El Kibutz Hoy

El Kibutz Hoy
Es difícil referirse al kibutz como una entidad homogénea ya que existen cientos de ellos a lo largo de Israel y es casi imposible encontrar dos que posean las mismas características. Sin embargo, en términos generales se puede definir al kibutz como una organización de personas que habitan en una zona rural y que llevan un estilo de vida basado en los principios del socialismo y del judaísmo laico (cabe mencionar que también existen kibutzim religiosos). El número de integrantes varía de entre 50 (o menos) a 600 miembros que llevan una vida comunitaria con muchas particularidades, como por ejemplo, existe un comedor común que es de todos y los encargados de mantenerlo son los mismos integrantes del kibutz que se turnan los cargos. La mayoría de los kibutzim, aparte de las actividades agrícolas, poseen fábricas de algún tipo que son las principales fuentes de ingreso. Los que trabajan fuera del kibutz entregan su sueldo, el que es redistribuido entre todos los integrantes del kibutz (javerim) de manera que todos reciben aproximadamente lo mismo, en función de sus necesidades. Finalmente cabe destacar la gran importancia que tiene la educación en el kibutz, donde existen escuelas excelentes y además el kibutz financia los estudios universitarios de aquellos que, terminado el ejército, quieren seguir viviendo como javer kibutz. Originalmente, los kibutzim se formaban para trabajar la tierra y transformar los pantanos y desiertos en tierras cultivables. El estilo de vida socialista (sin propiedad privada, sin autoritarismos y donde todos dan según sus posibilidades y reciben según sus necesidades), surgió de forma casi espontánea entre los jalutzim que llegaban a colonizar la tierra prometida. Con el transcurso de los años el kibutz pasó a constituir una microsociedad socialista inmersa en la sociedad israelí que es capitalista. Sin embargo hubo toda una transformación al llegar el cambio generacional en el kibutz. Los fundadores eran básicamente sionistas y estaban dispuestos a trabajar día y noche para formar el estado de Israel. Una vez que el estado se consolidó y también los kibutzim, comenzó un proceso de transformación del kibutz que todavía continúa. Esta transformación o evolución es consecuencia de la influencia que tiene la sociedad israelí en la microsociedad kibutziana y, en mi opinión, tuvo dos frentes de acción. Por una parte la caída del muro de Berlín, el predominio mundial del capitalismo en el mundo y principalmente el desprestigio del comunismo provocaron en los javerim antiguos del kibutz una especie de desencanto por el estilo de vida socialista. Si le sumamos a esto el hecho de que a los 20 años las comodidades y el confort dan lo mismo pero a los 60 sí que importan, obtenemos una auténtica necesidad por mejorar el nivel y la calidad de vida por parte de los javerim del kibutz. Si además consideramos la crisis económica generalizada que sufren los kibutzim debido a la baja rentabilidad de la agricultura, al mal manejo en otros años y a lo poco favorable para los kibutzim de las políticas llevadas a cabo por algunos gobiernos de derecha, obtenemos que el javer kibutz ve con preocupación el hecho de no poder mantener un nivel de vida con las suficientes comodidades en comparación con lo que la ciudad puede ofrecer. El otro frente de acción recae en los niños del kibutz, quienes nacieron en un ambiente consolidado, crecieron en la casa de los niños visitando a sus padres unas horas al día, gozando de esta sociedad igualitaria como si todo el mundo fuera así. Sin embargo al rededor de toda esta libertad están los límites del kibutz y afuera la ciudad, que los atrae con mucha fuerza. Es así como después de hacer el ejército, la mayoría de los jóvenes se van a vivir fuera del kibutz aunque muchos regresan para quedarse en forma definitiva. El kibutz hoy en día es más heterogéneo y en él se pueden ver toda clase de personas. Básicamente existen los javerim kibutz, que son los miembros del kibutz, propiamente tal, los voluntarios, que son extranjeros que se vienen a vivir al kibutz por un tiempo (seis meses o un año), los asalariados, que son empleados del kibutz y vienen a realizar trabajos puntuales y por último los que viven en el kibutz temporalmente. Este último grupo esta formado por inmigrantes recién llegados a Israel, postulantes a ser javer kibutz y turistas. Pese a todas las falencias y problemas que presenta el kibutz, si bien no es la materialización del socialismo utópico (ni pretende serlo), para muchos la vida kibutziana sigue siendo la mejor alternativa existente en un mundo lleno de egoísmos, guerras e injusticias. El kibutz aparece como un bastión del humanismo diciendo que el hombre vale por lo que es y lo que hace y no por lo que tiene. Así, mientras siga habiendo gente que encuentra injusto que un obrero tenga un nivel de vida 50 veces menor que el gerente de la empresa que lo contrató, el kibutz seguirá siendo una opción de vida vigente.
ESTE SÍMBOLO DEL igualitarismo socialista, ¿se habrá transformado en burla de sus propios principios?En la cumbre de su auge productivo en los 60, el kibutz constituyó apenas el 3% de la economía israelí, y el porcentaje ha disminuido a poco más del 2% en el presente. Hoy en día, Takam, la unión kibutziana del movimiento laborista, y Artzi, de índole más izquierdista, han unido sus fuerzas para evitar su derrumbamiento. Sin embargo, ambos se mantienen gracias a la subvención gubernamental. En 1972 Jean Paul Sartre alabó al kibutz como atalaya del socialismo en el mar de regímenes feudales de Medio Oriente. Él creyó que la granja colectiva, fruto del pensamiento ideológico marxista-sionista de los albores del siglo XX, señalaba el camino del porvenir. Pero en el 2003, más del 60% de los jóvenes nacidos en el kibutz lo abandonan antes de cumplir los 30. Nuevas familias llegan, pero la continuidad se ha convertido en un desafío.Otro reto que escuece más son los cultivos, pues la declarada meta del kibutz fue fomentar la autosuficiencia agrícola. Irónicamente, dos difíciles milenios en la diáspora judía han transformado al pastor-agricultor de la Biblia en un ser irremediablemente urbano. En el kibutz Lotan, en el sur del país, obreros procedentes de Tailandia realizan labores como la cosecha: tareas que son desprestigiadas por la población local. La presencia de jornaleros tailandeses hace surgir una cuestión moral. Mientras agrupaciones israelíes (Natan, Adam, etcétera) de derechos humanos velan por las condiciones de los trabajadores asiáticos, preguntamos: ¿se habrá transformado el kibutz, símbolo del igualitarismo socialista y emancipación judía, en burla de sus propios principios?La industrialización y el mundo de las telecomunicaciones desempeñan los papeles más influyentes en la economía israelí. Por ende, muchos “kibbutzim” han construido sus propias fábricas. Epilady, el aparato depilatorio femenino de renombre mundial, salió de los talleres de un kibutz en la década de los 80. El kibutz Mizra, ubicado cerca del monte Gilboa, donde murió el primer rey israelita, Saúl, ha desarrollado su propia industria alimenticia: Carnes Mizra, incluyendo el jamón (a pesar de la prohibición religiosa, tanto judía como musulmana, contra la carne de puerco). Fervientemente laico, pero rodeado de paisajes bíblicos, Mizra atrae peregrinos judíos y cristianos, impulsando el turismo como ingreso adicional.La propiedad privada tampoco es maldición entre los kibutzianos: muchos, como el kibutz Har El, en los alrededores de Jerusalén, alquilan pisos a estudiantes y a profesionales solteros, beneficiándose tantos unos como otros. La supervivencia del kibutz no está asegurada. Su renovación está supeditada a su habilidad de flexibilizarse. Se debe abrir los estrechos parámetros de membresía para acoger a gente más allá de la típica familia de clase media ashkenasí. Con pocas excepciones, judíos yemeníes (una de las comunidades más antiguas del país) no formaron parte del tejido social del kibutz..., tampoco lo ha sido la mayoría del país: judíos de origen norteafricano. Recientemente, los inmigrantes rusos se han mostrado reacios a la posibilidad de incorporarse en el kibutz. Entidades colectivas no atraen a los que padecieron la torpe burocracia estalinista.El futuro del kibutz, entonces, dependerá de la voluntad de sus integrantes a implementar nuevas estrategias que les permitan traspasar la periferia para ofrecer lo que exigen muchos: una alternativa a la brecha socioeconómica, cada vez más grande, que aqueja Israel.S. FREDRICK, antropóloga

Vuelve el Kibutz

VUELVE EL KIBUTZ
Gavri Bar Gil

A mediados de los años 80 del siglo pasado, los Kibutzím de Israel entraron en una grave crisis económica. Esta crisis, causada principalmente por razones políticas, se sumó a una crisis ideológica que había comenzado anteriormente, pero había sido reprimida hasta ese momento.
La crisis política y económica originó una crisis demográfica que llevó al abandono de más de 50.000 "kibutznikim" durante los veinte años siguientes.

A principios de los años 2000 parecía que el ideal kibutziano, el cual había sido in ingrediente primordial en el desarrollo del Estado de Israel, estaba a punto de derrumbarse. Los Kibutzím se encontraban en una crisis existencial, y más de la mitad de ellos (aprox. 135 de un total de 276 Kibutzím) fueron declarados insolventes y se encontraron en peligro de disolución.

En la última década, la sensación del inminente fin del Kibutz se intensificó en la opinión pública y en los medios de difusión, un alto precio adicional para la "villa global" que habitamos.

Pero resulta que la cosa no fue así. Lejos de la opinión pública y de los medios de comunicación que la acompañan, se produjo en la última década una dramática revolución durante la cual el ideal kibutziano se transformó y adaptó al siglo XXI.
Hoy en día, a finales de la primera década del siglo XXI, el Kibutz vuelve a ser un componente central y dominante en la sociedad israelí y en el desarrollo del Estado de Israel.

El año pasado, el volumen de producción de la industria kibutziana totalizó 8 billones de dólares, aprox. un 11% de la producción industrial del Estado de Israel. La agricultura kibutziana, que representa un 35% de la agricultura nacional, generó un volumen de ventas de 1,5 billones de dólares. La contribución de los Kibutzím representa actualmente un 6% del producto nacional bruto del Estado de Israel. Cabe destacar que ello proviene de una población que representa un 1,7% del total de la población civil del país.

En el año 2000, la mitad de los Kibutzím se encontraba en peligro de disolución. Actualmente sólo 30 Kibutzím aún se encuentran en estado de riesgo económico, mientras que todos los demás se encuentran en vías de estabilización y crecimiento.

Paralelamente a la estabilización económica, vino también la estabilización demográfica: En los últimos tres años, los Kibutzím absorben más gente que la que los abandona. Durante años, no sólo que los Kibutzím no recibían miembros nuevos, sino que los miembros existentes abandonaban el Kibutz. En el último año, muchos Kibutzím han absorbido decenas de nuevos Javerím (miembros del Kibutz).

Si tomamos en cuenta que el 75% de los Kibutzím están ubicados en la periferia y en las zonas limítrofes al sur y al norte del país, es evidente que se trata de una recuperación realmente dramática, con significativas consecuencias para los intereses principales del Estado de Israel.

¿Cómo sucedió? ¿Qué fue lo que pasó dentro de los Kibutzím, que hizo posible este vuelco tan drástico?

Durante la última década, los Kibutzím llevaron a cabo una serie de cambios estructurales, que juntos originaron este vuelco y dieron lugar al dramático proceso de recuperación. Los valores fundamentales sobre los cuales el ideal kibutziano había sido fundado, aún siguen vigentes, pero su forma de implementación cambió, y ahora es más acorde a la evolución del tiempo. El nuevo pensamiento, y el afán de reconstruir el Kibutz de manera tal de generar una mejora en la situación económica y atraer nuevamente a los jóvenes dio lugar a un equilibrio más correcto de los valores de la ideología kibutziana.

Ante todo, el sistema administrativo fue objeto de una reforma de base: En el pasado, todas las decisiones, tanto aquellas de carácter social como las de carácter comercial, eran tomadas conjuntamente por todos los miembros del Kibutz, como expresión de igualdad, principio supremo del Kibutz. Hoy en día, negocios por un lado y comunidad por el otro. La comunidad continúa manejándose según el mismo principio de participación de todos los miembros en la toma de decisiones, pero los negocios se rigen por los criterios profesionales generalmente aceptados en el mundo.

El mercado laboral también sufrió cambios: En el pasado, todos los "Javerím" trabajaban en el marco del Kibutz y en base a las necesidades del Kibutz, mientras que hoy en día, los "Javerím" son profesionales, y el 35% de ellos trabajan en profesiones libres, fuera del Kibutz. Este cambio forma parte del equilibrio generado entre la importancia del trabajo en sí y la importancia del sustento y del afán de autorrealización, en contraste con el pasado, en el que predominaban las necesidades colectivas.

Otro cambio se manifiesta en la provisión de seguridad personal a cada miembro del Kibutz: Antes, se acostumbraba que ningún miembro poseía bienes propios, sino que todo pertenecía a la comunidad. Como consecuencia del cambio operado, hoy en día hay una tendencia a asegurar derechos jubilatorios personales y en algunos Kibutzím las viviendas son registradas a nombre de los "Javerím".

El cambio principal que más influyó en la ideología kibutziana fue, quizás, la transición del ideal de igualdad total a igualdad básica. Si anteriormente el Kibutz aspiraba a la igualdad total entre sus miembros, actualmente existe una relación entre el sustento y los ingresos de cada miembro, y el presupuesto que éste recibe a fin de mes. Esto se logró por medio de la imposición interna de altas contribuciones tributarias a aquellos miembros que ganan sueldos más altos, para evitar la disparidad dentro de la comunidad. También se ha generado una red de seguridad, que asegura que ningún miembro de la comunidad caiga, y que aún quien, por cualquier motivo, no recibe un salario aceptable, pueda recibir un complemento, de los fondos colectivos recolectados de la contribución interna de los "Javerím".

El nuevo Kibutz conserva los valores fundamentales de la ideología kibutziana de hace 100 años, pero generó un equilibrio más apropiado entre los mismos: Si en el pasado practicamente no cabía la idea de la voluntad propia frente a la voluntad colectiva, hoy en día se da más cabida al individual y a la familia, frente al lugar en la comunidad.

El Kibutz del siglo XXI no es el mismo Kibutz de 100 y 50 años atrás, pero aún es una forma de vida que representa un ejemplo de sociedad justa, igualitaria y solidaria, más que cualquier otra sociedad occidental.

Consumo sustentável, lixo e energia limpa


Consumo sustentável, lixo e energia limpa

Consumir sem consumir o mundo em que vivemos A humanidade caminha para um beco sem saída. Daqui a mais ou menos 100 anos, não haverá no planeta recursos para alimentar e aquecer os seres humanos. A continuar o atual ritmo de exploração do planeta, em um século não haverá fontes de água, reservas de ar puro, terras para agricultura em quantidade suficiente para a preservação da vida. Mesmo na situação atual, em que metade da humanidade está abaixo da linha de pobreza, já se consome de 20% a 30% a mais do que a Terra consegue renovar. Se a população do mundo passasse a consumir como os americanos, seriam necessários mais quatro planetas iguais a este para garantir produtos e serviços básicos, como água, energia, alimentos para todo mundo. É por isso que o Instituto Akatu defende e divulga a idéia do consumo consciente, que definimos como um processo de escolha que equilibra o consumo e a sustentabilidade do planeta. O consumidor consciente leva em conta o impacto de suas ações sobre a economia, a sociedade e o meio ambiente toda vez que usa água ou energia elétrica, joga fora o lixo ou vai às compras. Ser um consumidor consciente envolve ação cotidiana, pois mesmo o consumo de poucas pessoas, ao longo de suas vidas, faz diferença, tendo um impacto muito importante sobre a sociedade e o meio ambiente. Pegue-se o exemplo de uma família de quatro pessoas desperdiçando 100 gramas de alimentos a cada refeição. Imaginando que elas vivam até os 70 anos, somente essa família terá jogado fora 31 toneladas de comida durante esse tempo. Essa quantidade seria suficiente para alimentar 17 crianças por dez anos. Consumir com consciência é uma questão de cidadania, pois o consumo de um grande número de pessoas, mesmo por um período curto de tempo, igualmente faz enorme diferença. Digamos que um cidadão escove os dentes com a torneira aberta. Assim, em vez de gastar apenas 2 litros de água, vai usar 14 litros, enquanto 12 litros de água limpa e tratada entram literalmente pelo cano. Se 4 milhões de cidadãos que fazem a mesma coisa resolvessem escovar os dentes com a torneira fechada, a água economizada em um dia seria suficiente para abastecer, nesse dia, uma cidade como Goiânia, em Goiás, com 1 milhão de habitantes. O consumidor consciente sabe que estamos todos no mesmo barco, e que seus atos cotidianos repercutem de alguma forma na sua cidade ou no seu país -uma questão de interdependência. Voltando ao exemplo da família em que cada pessoa joga fora 100 gramas de alimentos a cada refeição, se apenas vinte famílias tiverem o mesmo comportamento, serão desperdiçadas anualmente cerca de 9 toneladas de comida. É um número impressionante. Imaginemos, então, que todas as famílias de uma cidade como Rio de Janeiro ou São Paulo façam o mesmo. Com tanta comida indo para o lixo, seria preciso produzir mais alimentos para abastecer os mercados e feiras, provocando assim um aumento de preços que vai afetar a todos. Mas este é apenas um aspecto desta história. O consumidor consciente é aquele que percebeu o enorme poder transformador que tem nas mãos. O simples ato de ir às compras é capaz de levar as pessoas a mudar o mundo. E isso não é excesso de otimismo. Como isto é possível? Quando as pessoas escolhem comprar produtos ou serviços de empresas socialmente responsáveis, as que não têm como objetivo apenas tirar proveito da sociedade, mas que a respeitam e dão algo em troca. As que levam em consideração a sociedade e o meio ambiente. Indústrias, por exemplo, que não poluem o ar ou a água. Ou produtores agrícolas que não exploram o trabalho infantil. Ou ainda lojas de móveis que não vendem peças fabricadas com madeira arrancada ilegalmente das florestas nativas. Ou as empresas que investem em suas comunidades, seus funcionários e suas famílias. Privilegiando essas empresas, o consumidor deixa clara sua escolha por quem ajuda a construir uma sociedade mais justa. A idéia, portanto, não é que as pessoas deixem de comprar o que julgam necessário para suas vidas, nem que façam enormes sacrifícios. Quando todo mundo faz a sua pequena parte diariamente, o resultado é um mundo melhor para todos. São pequenos gestos que produzem grandes transformações. É um por todos e todos por todos. O Instituto Akatu contribui para que a sociedade caminhe na direção de um modelo sustentável, para que toda a humanidade possa consumir sem consumir o mundo em que vive. O relatório anual do WWI, Worldwatch Institute, Estado do Mundo 2004, foca o "estado do consumo e o consumo sustentável" e será brevemente lançado no Brasil com apresentação de Enrique Iglesias, presidente do BID-Banco Interamericano de Desenvolvimento. Em parceria com o Akatu o WWI-UMA estará incluindo no livro informações sobre consumo no Brasil. Brasil recicla menos de 5% de seu lixo urbano. O desperdício no Brasil é considerado um dos maiores do mundo. A diferença é que nas nações desenvolvidas a reciclagem dos materiais supera a brasileira. O paulistano gera por dia 1,2 quilo de lixo domiciliar, enquanto o americano, 2 quilos e o japonês, 2,8 quilos. Embora a população desses países consuma mais e gere mais lixo, há mais consciência em relação ao reaproveitamento. O Brasil recicla menos de 5% de seu lixo urbano. Esse percentual é de 40% nos EUA e na Europa, informa a UBQ (União Brasileira para a Qualidade). Apesar de o Brasil não estar na lista dos países mais preocupados com o desperdício, é campeão na reciclagem de papelão e de latas de alumínio. Do total dessas latas produzidas no Brasil, 85% são recicladas. No Japão, 82,5%. No caso do papelão, a diferença é maior ainda: a reciclagem é de 72% no Brasil e de 65% na Europa. Mas o Brasil recicla pouco outros materiais: 21% de plástico e 38% de vidro e de papel. Mas o Brasil só é líder na reciclagem nesses dois produtos por necessidade --e não por consciência. Mais de 300 mil catadores vivem do lixo para garantir renda mensal de até R$ 500. (= US$ 170). Os catadores também usam o lixo orgânico para sobreviver. Na Ceagesp, em São Paulo, uma tonelada de alimentos é desperdiçada diariamente. "Nosso desperdício só não é o dobro por causa da ação dos catadores", diz Ossir Gorenstein, engenheiro da Ceagesp. (Folha SP)
Projetos de energia limpa atraem investidores japoneses Os projetos de energia renovável da América Latina estão despertando a atenção de empresas japonesas. O Japão é um dos países que, preocupado com o aquecimento global, já ratificou o protocolo de Kyoto e, além de estar implantando um plano de redução de gases de efeito nocivo à camada de ozônio, começa a analisar projetos cujos investimentos tenham como retorno dos créditos de carbono, beneficiando o país. No plano interno de redução dos gases de efeito estufa, o Japão já aderiu à mistura do álcool à gasolina. De olho no setor canavieiro, onde se concentra a maior parte dos pequenos e médios empreendimentos de energia renovável, empresas japonesas do setor elétrico convidaram o representante brasileiro da Econergy, especializada em soluções financeiras inovadoras voltadas a empreendedores de tecnologias limpas, Marcelo Schunn Diniz Junqueira, para iniciar as negociações dos investimentos no Brasil. "O Brasil pode receber investimentos de aproximadamente US$ 20 milhões apenas com o potencial das pequenas e médias empresas de energia renovável, explica Marcelo. "Existe um grande interesse destas instituições em atuar tanto na redução da emissão de gases de efeito estufa através da mistura de álcool na gasolina como em adquirir créditos de carbono gerados em projetos de Mecanismo de Desenvolvimento Limpo em países como o Brasil. Muito embora a mistura do álcool na gasolina seja uma medida ainda dependente de soluções político-econômicas, a compra dos créditos de carbono já começou", diz. > > Créditos de Carbono > O cálculo de engenharia para disponibilizar créditos de carbono no mercado varia de acordo com a tecnologia empregada pelo projeto e o cenário de referência a que cada um deles é comparado. De qualquer forma, a não-emissão de gases de efeito estufa para a atmosfera é convertida em toneladas equivalentes de gás carbônico (tCO2e). Para projetos implementados no Brasil, essa tonelada é chamada de Redução Certificada de Emissão (RCE). De acordo com Marcelo Junqueira, a comercialização de Créditos de Carbono deve representar um movimento de cerca de U$ 1 milhão por ano para os países em desenvolvimento, principalmente Brasil, China e Índia.O Brasil, de modo geral, deve ser um grande beneficiário desse novo mercado, onde as usinas sucroalcooleiras do Estado de São Paulo têm condições de disputar uma grande fatia. Sua área agricultável é enorme e a sua produção de energia limpa tende ser cada vez maior.Além da biomassa para a produção de eletricidade, também podem obter créditos de carbono para comercialização os investimentos em pequenas Centrais Hidrelétricas (PCHs), projetos de eficiência energética, aterros sanitários, energia solar, energia eólica ou qualquer projeto que diminua o consumo de combustíveis fósseis ou evite a emissão de gases de efeito estufa para a atmosfera.(Ateliê da Notícia). Enviado por Roberto Lamego

Identidad e ideología en el pensamiento judío contemporáneo


Identidad e ideología en el pensamiento judío contemporáneo
Prof. Shalom Rosenberg

A. LA DEFINICION DE IDENTIDAD
El cometido de este trabajo es la investigación de los problemas de la identidad judía. Se diferencia de otras investigaciones en la definición de su punto de partida, que no es la investigación, la observación empírica de uno u otro grupo, sino el estudio de los distintos sistemas ideológicos del pensamiento judío, el religioso y nacional, en las últimas generaciones. La multiplicidad de sentidos o significados en el concepto de identidad, exige a mi entender un enfoque metodológico de tales características.
En el campo de la psicología social, el término "identidad" tiene una significación técnica precisa aún cuando no unívoca. Siguiendo a D.R. Miller, diferencia Shimón Herman entre distintos aspectos de la identidad.[1] Según su concepto, deben ser distinguidas una de la otra, la identidad colectiva objetiva (la visión del hombre a los ojos de los otros), la identidad colectiva subjetiva (la forma como el individuo capta su imágen a través de los ojos de los otros) y la autoidentidad o, en otra terminología, el autoconcepto (la representación del hombre a sus propios ojos).
Además del concepto de identidad debe ser explicado también el concepto de identificación. La identificación se refiere a la forma en la cual, por ejemplo, el judío de una determinada comunidad, o los judíos de una determinada comunidad, están dispuestos a ser considerados judíos y a actuar dentro de los marcos.
La identidad colectiva objetiva tampoco tiene un significado unívoco. Ella puede provenir de la relación de un hombre a distintos grupos de presión externos (de no judíos) o de grupos internos (de judíos). Con la ayuda de estas distintas clarificaciones, podemos tratar de referirnos a los distintos conceptos y tratar de ubicarlos en una especie de red de coordenadas generales. Así por ejemplo, la definición halájica del judío es parte de su identidad colectiva objetiva.
Al lado del uso del término "identidad" como un término técnico en la psicología, nos encontramos con un uso adicional que está unido a distintas doctrinas filosóficas. La "identidad" del hombre es captada aquí como una esencia especial que existe dentro del hombre y que puede ser ocultada, reprimida, redescubierta y estar sujeta a un conflicto continuo entre la alienación y la autenticidad. Este uso se hace en los marcos de un sistema mucho más amplio, ya sea psicoanalítico o existencialista. En este concepto la parte psicológica se convierte en base de una concepción del mundo y de una posición filosófica.
En el marco de estas concepciones se agrega el uso descriptivo del término "identidad" una connotación valorativa y un significado prescriptivo. Usando el lenguaje de esta tendencia, se puede definir, por ejemplo, a la esencia del sionismo como el redescubrimiento de la identidad verdadera del judío y tratando de sacar las conclusiones prácticas que se deducen de esta definición. Esta comprensión de la identidad permite el uso del término "alienación" como un término correlativo, es decir, de la alienación de su auto-identidad. Acorde a esta terminología, la asimilación es una posición negativa, no auténtica, no solamente desde el punto de vista de la fidelidad del judío a su pueblo sino también desde el punto de vista de su fidelidad al sionismo, ya que en la asimilación el judío no expresa lo que tiene dentro de sí, no expresa su situación, que es para él un dato que él no puede cambiar. Creo no equivocarme cuando aplico esta interpretación al pensamiento de Eliezer Schweid.
El concepto de identidad es en esta forma una clave para la comprensión de los argumentos en su concepción. Tal enfoque es particularmente significativo, si confrontamos el uso del término identidad con el uso que Albert Memmi hace del término "condición". Si analizamos esta diferencia de lenguaje con la diferenciación conceptual anteriormente citada de Miller y de Herman, podemos afirmar que mientras que el concepto "condición" trata de destacar la identidad colectiva objetiva, el concepto de "identidad" destaca la identidad subjetiva, y es indudable de que concepciones sociológicas e ideológicas están detrás de la preferencia de un término que expresa más bien las relaciones exteriores objetivas entre el judío y le medio ambiente en el cual vive, en lugar de un término que exprese el mundo íntimo del hombre, dicotomía esta que Eliezer Schweid expresa a través de su propósito de definir el judaísmo como una vivencia cultural en lugar de una situación determinada por el destino.
El enfoque de la identidad en los marcos de una teoría psicológica o de una concepción filosófica es esencial para el estudio del tema. Empero el análisis del uso del término "identidad", tal como aparece en el pensamiento judío, muestra que nos encontramos frente a un término vago y oscuro, y este hecho acumula dificultades e incomprensiones ante todo estudio dedicado al tema. Con todo creo que el uso tan extensivo y amplio de un término técnico fuera de los límites estrechos de la psicología nos enseña que cumple una función muy importante, función cuyo sentido debemos dilucidar. Esta función está unida, creo, a la gran diferenciación entre las distintas ideologías judías y las posiciones políticas a ellas vinculadas. La diferencia de estas ideologías no se reduce a detalles secundarios, a líneas de acción o a debates relativos a los medios a emplear.
Esta diferenciación se expresa a veces en debates sobre la esencia misma del judaísmo hasta tal punto que vivimos hoy una situación paradójica, - que nos dejó de importunar debido al hecho de que nos acostumbramos a ello -, en la cual diferentes corrientes coinciden en las acciones concretas y pragmáticas sin que exista identidad o aún cercanía entre ellos respecto a los motivos ideológicos que deberían servir de base para este consenso práctico. Ante tal situación, el uso de un término determinado para la definición del judaísmo, es muy problemático. Esto es cierto en lo que se refiere al uso de un término como "religión" o algún término étnico cualquiera como por ejemplo "nación", "pueblo", etc.
A los debates ideológicos internos se suman en muchos casos controversias e imprecisiones en el uso de estos términos en los marcos de corrientes ideológicas, políticas y económicas que se oponen entre sí. Así, por ejemplo, en los países latinoamericanos, existe una imprecisión en lo que se refiere a la delimitación de las diferencias entre términos tales como "Nación" y "Estado", en su uso en constituciones y en documentos oficiales. Este fenómeno está lógicamente unido a una política de inmigración y al hecho de que la ley local establece que la ciudadanía y la nacionalidad están unidas con el lugar de nacimiento y no con el origen étnico de los padres. Esta es una situación en países de inmigración, pero una situación totalmente distinta ocurre en muchos países europeos que permiten definiciones nacionales distintas dentro de los límites de un solo estado, o que están interesados en preservar los lazos nacionales con los hijos que emigraron de él. Las teorías políticas imperantes en distintos países y las semánticas que de éstas se desprenden, ejercieron gran influencia sobre la terminología y su uso en los escritos ideológicos judíos en estos países.
A más de esta relación hacia las teorías y las ideologías, debemos tomar en cuenta en todo estudio, consideraciones obviamente políticas como por ejemplo el deseo de evitar los problemas de doble lealtad o por el contrario, el deseo de destacar la necesidad de cambios maximalistas de carácter sionista, como por ejemplo, la aliá. Estos hechos destacan, a mi entender, los complejos problemas que suscita el uso de cualquier concepto referente a una autodefinición en el pensamiento y las publicaciones judías modernas. Aquí también debemos tener en cuenta la relación hacia las teorías y las situaciones exteriores y asimismo hacia el policromismo ideológico interior. En este sentido el concepto de identidad judía es diferente al de todos los otros conceptos "comprometidos" en concepciones o corrientes ideológicas.
Hemos hecho notar anteriormente la falta de claridad, la oscuridad de ese término. Esa oscuridad es la que le confiere a la "identidad" su valor y su vínculo con la psicología le aseguran una honorable neutralidad ideológica. Más, a pesar de todos los problemas involucrados en un uso tal del concepto "identidad", nos parece que esta situación es deseable. No nos encontramos simplemente frente a un hecho pragmático. La neutralidad del concepto de "identidad" nos permite la creación de una especie de meta-lenguaje en el cual se puede hablar de ideologías que se diferencian una de la otra no solamente en las tesis que de estas se pueden deducir sino también en sus lenguajes. Un meta-lenguaje tal puede permitir aún la construcción de teorías más amplias y quizás la posibilidad de un debate racional sobre ellas.
Es necesario recalcar por último que un uso tal de términos como "identidad" e "identificación", distinto del uso standard en la psicología social permite, a pesar de todo, una comparación y una confrontación con el uso técnico y por ello puede ser provechos, a mi entender, aún para la investigación empírica en el campo psicológico y sociológico.

B. EL CONTENIDO DE LA IDENTIDAD JUDIA
A través del análisis de los contenidos de los escritos del pensamiento judío en la época moderna, se puede establecer que existen tres categorías principales en todo lo que se refiere a la identidad judía tal como la hemos definido.
A pesar de la gran diferencia que existe entre las distintas respuestas dadas, comparando los escritos de los representantes de cada uno de estos grupos, se puede encontrar en ellos un común denominador, posibilitando así el enfoque de la respuesta a través de tres polos. Por un lado, existen características, cualidades, que permiten definir al judaísmo como una fe y un sistema de mandamientos religiosos: un sistema de mitzvot, que permiten centrarlo en un polo al que definiremos brevemente como el polo religioso. En un segundo polo se encuentran reunidos atributos que definen al judaísmo como un grupo étnico, como un pueblo, como una nación, siendo la diferencia entre estos términos la resultante, como hemos recalcado anteriormente, de posiciones ideológicas más específicas.
La existencia judía a través de las generaciones se puede situar en derredor de estos dos polos y el vínculo entre éstos ubican las ideologías que trataron de explicar esta existencia, y más aún, fijar su evolución futura en la diáspora. Frente a estos dos polos que caracterizan al judaísmo galútico, podemos situar un tercer polo, el polo estatal, imprescindible para la comprensión de la existencia judía en nuestros días. Más aún, en la diáspora, la existencia estatal judía constituyó siempre un polo de identificación si no actual por lo menos potencial. Este hecho es real indudablemente en lo que se refiere al judaísmo de las últimas generaciones, mas también lo fue con el judaísmo antiguo cuando toda meta en el futuro incidió en forma inequívoca sobre la situación en el presente, ya sea a través del ideal sionista, ya sea a través de las esperanzas mesiánicas a través de las generaciones.
Un simple diagrama nos va a permitir clarificar estos tres polos:
Un análisis del primer eje que une el polo nacional al polo religioso nos permite profundizar en la comprensión de los conflictos ideológicos entre las distintas corrientes del pensamiento judío desde la época de la emancipación.
A través de las generaciones fue considerado el judaísmo como una unidad nacional-religiosa. Es indudable que en todo estudio de épocas anteriores debemos hacernos la pregunta si esta concepción perteneció también subjetivamente a los judíos de distintas épocas. En otras palabras, ¿eran ellos conscientes de esta dualidad? Esta es una pregunta interesante pero es indudable que es irrelevante en nuestro estudio. Es un hecho, y este hecho me parece indiscutible, y por lo tanto creo que está demás el tratar de probarlo, que sea cual fuere el criterio que apliquemos siempre nos encontraremos con que el judaísmo clásico fue una unidad religiosa y étnica a la vez, sea cual fuese la característica específica que debamos asignar a la singularidad étnica. Tal como escribe Martín Buber, "Israel es un pueblo sin igual por ser el pueblo único en el mundo que desde sus comienzos fue una nación y un grupo religioso a la vez". Muchos rechazaron esta concepción y dieron en llamarla "concepción teológica"…Mas lo cierto es que nos hallamos frente a una concepción histórica básica sin la cual es imposible comprender la realidad, el hecho histórico denominado Israel".2
La visión del judaísmo como una unidad nacional-religiosa fue aceptada indudablemente por muchas corrientes dentro del pensamiento judío moderno. Las diferencias entre estas distintas corrientes son simplemente semánticas. Puede decirse que la idiosincrasia del pueblo judío no permite el uso de términos como nacionalidad o religión, términos que son producto de evoluciones que caracterizan al mundo occidental solamente y no al pueblo judío. Creo que esta formulación, a pesar de que puede o no ser verdadera, es problemática, ya que las necesidades de intercomunicación con concepciones de pensamiento generales de aquel mundo occidental del cual se separó el judaísmo, nos obligan a usar la versión que he definido antes. Versión para la cual el judaísmo no es una entidad sui generis sino una nación y una religión a la vez. Esta me parece una razón suficiente para usar una formulación que habla de la existencia pluridimensional judía en lugar de hablar de una esencia singular que le es específica.
En una forma gráfica, creo que podemos hablar de mapas distintos, mapas de religiones, mapas de naciones y de estados, en todos los cuales existe una representación de la identidad judía. El uso de una terminología aceptada es algo más que simple convención semántica, es un medio imprescindible en las luchas ideológicas y políticas. La expresión legal y constitucional de la relación que existe entre la identidad nacional y la religiosa, se encuentra en su forma clásica en la Resolución de la Suprema Corte de Justicia israelí en el juicio de Oswald Rufeisen contra el Ministro del Interior.3 A pesar de que no estoy de acuerdo con algunos de los argumentos, sobre la base de los cuales el alto tribunal determinó su veredicto, me parece que esta sentencia expresa la unión entre la definición religiosa y la definición nacional en el caso judío, es decir que no pueden existir judíos no identificados en alguna que otra forma con la religión judía.
A pesar de lo dificultoso que es encontrar una concepción pura en la historia del pensamiento judío, surgieron en las últimas generaciones intentos de polarizar al judaísmo sólo en uno de estos polos. La ideología en la cual se apoyó la lucha por la emancipación judía en la Europa occidental y central puede verse como un intento de polarización en dirección al primer polo. De acuerdo a ella, el judaísmo es simplemente una religión y los judíos son "alemanes de fe mosaica", "franceses de fe mosaica", etc. Una posición complementaria puede hallarse en los distintos movimientos nacionales judíos a fines del siglo 19 y el siglo 20, especialmente en aquellos movimientos con notorias tendencias izquierdistas, desde el "Bund" hasta las fracciones judías del Partido Comunista Soviético.
Aquí nos hallamos frente a un intento de definir el judaísmo por medio de criterios nacionales puros, especialmente el lenguaje, sin tomar en cuenta los aspectos religiosos generales y vinculados a la esencia judía. Jaim Zhitlovsky define esta concepción en una forma clara e unívoca: "Así como la fe religiosa judía es completamente independiente de un ente nacional cualquiera, así también la entidad nacional judía es completamente independiente de una fe religiosa cualquiera". Zhitlovsky trató de reunir en una forma artificial el desarrollo de la identidad judía con el esquema de las tres etapas dialécticas. La primera situación fue aquella que identificó la religión con la nacionalidad que es la tesis. La ideología de la asimilación nacional es la antítesis y el nacionalismo laico constituye la síntesis. La posibilidad de un "judío de fe cristiana" se convierte así de una desenfrenada especulación en una posibilidad real.4
El sionismo, por su parte, es aquel movimiento que trató de destacar la significación política del tercer polo, del polo estatal. El punto de partida del sionismo fueron los otros dos polos y hablamos de un punto de partida y no de un acto de negación. De ahí también la existencia de dos sionismos o de dos principales corrientes sionistas: la religiosa y la nacional. Pero el estudio del sionismo nos enseña que no existe identidad entre el polo nacional y el polo estatal. Esta no-identidad puede ser ilustrada, a través de ejemplos de posiciones no sionistas que, sin embargo, fueron nacionales. Un ejemplo de esta posición son, a mi juicio, paradójicamente, los Neturei Karta, que expresan no una posición asimilacionista, sino una posición anti-estatal que se opone al Estado de Israel existente, al Estado de Israel forjado por manos humanas, sin aniquilar su autoconciencia que puede ser vista como una autoconciencia nacional-religiosa, por cierto que bastante problemática.
Los vértices del triángulo señalan los distintos polos de la identidad judía. Las aristas se refieren a las relaciones entre los polos. Estas aristas pueden ser destacadas si recalcamos, paradójicamente, los tres problemas centrales que por un lado tienen expresión legal, y por el otro, se encuentran enclavados en la problemática de la identidad judía. Nos referimos concretamente a tres leyes o grupos de leyes que los ejemplifican: la Ley del Retorno, las leyes del Sábado y los reglamentos para la inscripción en el rubro "nación" en la cédula de identidad. La Ley de Retorno representa la característica judía del Estado, es decir,las relaciones entre estado y nación. Las leyes del Sábado recalcan el plano significativo y problemático a la vez de las relaciones entre la religión y el estado en Israel. Los reglamentos que rigen la inscripción en el rubro nación están relacionados con el problema de la existencia de una nacionalidad judía desconectada de la definición religiosa y aún en oposición a ella, es decir, se refiere a las relaciones entre religión y nación.
Generalmente nos encontramos confrontados a estos problemas en bloque y no nos damos cuenta de la importancia de diferenciar entre estos tres grupos de problemas. La concepción aceptada y que ve en todos estos problemas meros apéndices de las problemáticas relaciones entre religiosos y laicos en Israel, cuya expresión más básica es el famoso status quo, es no sólo superficial, sino que implica además una flagrante injusticia para con la complejidad de los problemas de los problemas de la identidad y la identificación judías.
El estudio de los problemas concretos minimiza la plena significación del "peligro" al cual está expuesto el pensamiento judío desde el establecimiento del Estado. Y con la palabra "peligro" trato de expresar un concepto neutral desde un punto de vista metodológico pero que a mí personalmente me llena de ansiedad. Me refiero a la posibilidad de la ruptura entre la identidad judía y la identidad israelí, es decir, la creación de una auto-identificación israelí en base a la entidad política o a sus atributos, el idioma y el territorio.
Esta situación es posible que sea normal en muchos estados en el mundo, los ejemplos clásicos son indudablemente los países latinoamericanos. Un estado en esta situación, cuando trata de forjar la conciencia y la memoria nacional de su pueblo, cuando busca sus orígenes no educa hacia una identificación con los padres de los inmigrantes españoles sino con los indios, habitantes del lugar antes de la conquista. Según esta analogía, el israelí tendría que identificarse con el antiguo hebreo, más aún con el canaanita y no con el judío galútico, el padre de la colonización sionista. Es así como leemos por ejemplo, en uno de los manifiestos del ya clásico grupo canaanita: "El pueblo hebreo, hijo de Eretz Israel, es una unidad nacional nueva y separada, los hebreos originarios de la dispersión judía están unidos a ella con lazos espirituales y personales, la consideran como una fuente de inspiración para el crecimiento del pueblo hebreo pero junto con ellos este pueblo pondrá fin a la sujeción del Estado y de los judíos del mundo al régimen sionista". En otra fuente canaanita leemos la siguiente pregunta: "¿Es acaso el judaísmo una entidad colectiva o un grupo étnico? No y no. Cada grupo judío en cada uno de los países de su dispersión es en realidad un grupo étnico específico…que se parece mucho aún cuando no en forma absoluta al pueblo en cuyo seno vive…el judaísmo nunca fue una nación y no es una nación hoy, el judaísmo es una mera comunidad religiosa…"5
Es indudable de que en esta nueva polarización, podemos llamarla hebrea o canaanita, nos encontramos frente a una de las amargas ironías de la historia. El significado verdadero de esta polarización es que el sionismo causaría autodestrucción. El sionismo que significó la creación de una entidad política y su construcción, se encuentra ante el peligro de convertirse en un factor destructivo de la identidad judía, que sería reemplazada por una identidad política territorial nueva. Más que otro atributo, explica el lenguaje la verdadera significación de las diferencias entre estas tres distintas opciones ideológicas. Aquellas posiciones que vieron en el judaísmo una mera religión, no confirieron ningún significado al vínculo singular hacia el idioma hebreo, que les pareció un mero fósil de una existencia nacional ya inexistente. Esta actitud los llevó a la conclusión de que la liturgia religiosa debe ser transformada, y vertida a los distintos idiomas nacionales de los miembros de la fe mosaica y esto los llevó a exigir el cambio del idioma del libro de oraciones. Por otro lado, aquellas concepciones que se basaban en la definición nacional "purificada" de componentes religiosos no pudieron dejar de ver en el idioma idish el lenguaje nacional único del pueblo judío. Para quienes sustentaban este enfoque no era un mero instrumento de expresión nacional, sino que era considerado como el principal criterio para la definición de la esencia de la nacionalidad.
Como señalé más arriba, lo que se deduce de estas premisas es que no existe un único pueblo judío sino muchos pueblos judíos que se diferencian uno del otro de acuerdo al criterio de la lengua. Esta ideología se expresó a través de su relación hacia el lenguaje y también por un enfoque selectivo de la cultura judía y la herencia de las generaciones. En una última fase se transformó en selectiva en su relación hacia el propio idioma idish. El intento de construir una estructura fonética del idioma idish no fue un mero cambio de lenguaje hecho para simplificar el idioma, fue una revolución en contra de lo que parecía a aquellos ideólogos restos de los elementos religiosos que sobrevivieron en el lenguaje y que tuvieron su expresión en aquellas palabras y expresiones provenientes del hebreo que cuidaron sus características originales, por ejemplo, su estructura no fonética.
Así, nos hallamos frente a una situación paradójica en la cual la definición religiosa por sí sola y la definición nacional por sí sola no condujeron a la conservación del hebreo como idioma del pueblo. La conversión del hebreo en el idioma oficial del Estado de Israel fue la creación conjunta de la unidad nacional-religiosa del pueblo judío. También los problemas de la identidad judía renaciente en el Estado de Israel tienen su expresión en la relación hacia el lenguaje. Un lenguaje que es expresión y atributo de una identidad nacional se convirtió junto con el territorio, en un componente esencial de esta identidad. Este cambio de expresión en esencia refleja el proceso de laicización y en determinada forma se expresa en la destrucción de mucho de la connotación religiosa judía unida al lenguaje, y constituye por lo tanto uno de los problemas y de los peligros básicos a los cuales la cultura hebrea renaciente se halla sujeta.
C. IDENTIDAD A TRAVES DEL TIEMPO
Diversos fenómenos pueden esclarecer el significado y las funciones de la identidad judía en un contexto ideológico. Entre esos fenómenos sobresale por su importancia el de tiempo y ésto debido a las importantes relaciones recíprocas existentes entre el concepto del tiempo y el concepto de identidad que estamos analizando. Si en el contexto individual el concepto de identidad no se encuentra libre de problemas y de contradicciones en lo que refiere a sus constituyentes cronológicas, estas dificultades se acrecientan cuando pasamos a hablar de la identidad de un grupo. Así nos encontramos frente a la diferenciación muy importante que tuvo su origen en Kurt Levin, que pasó luego a ser utilizado ampliamente por los filósofos contemporáneos, la diferencia entre identidad y lo que puede ser llamado gen-identidad, es decir identidad a través del tiempo.
Tomemos un objeto cualquiera situado en un determinado instante del tiempo. Podemos preguntarnos a cuál de los objetos existentes en un instante anterior es aquel objeto idéntico. ¿El objeto A en T¹, es idéntico al objeto B o al objeto C en T²? Hay muchos problemas y paradojas que se basan en la problemática a las cuales las distintas posibles respuestas nos llevan. En el contexto nacional el problema es mucho más grave ya que la continuidad temporal, espacial-temporal, no permite una respuesta satisfactoria. Por otra parte, en el contexto social tampoco existe aquel criterio que puede ser suficiente para responder a las paradojas en el campo individual y me refiero a la memoria. La memoria es obviamente de una trascendencia indiscutible en lo que se refiere al establecimiento de nuestra identidad individual, pero esta memoria no es ninguna forma unívoca en lo que se refiere a los entes colectivos. Y la explicación de este problema suele ser hecho en dos formas distintas. Podemos investigar la situación bajo un aspecto empírico, investigación que establecerá en qué medida existe identidad a través del tiempo, es decir, en qué medida un individuo perteneciente al grupo está dispuesto a identificarse con otro grupo en el pasado.
La segunda posición o el segundo camino es el camino ideológico que fija o que establece la identidad de los distintos entes a través del tiempo en una forma a priori, en una forma programática. La posición empírica me parece insuficiente debido al hecho de que la educación, indudablemente problemática, es el factor más importante en la creación de una identidad tal. La identidad con el pasado es por lo tanto dinámica, función de los cambios en la educación y se encuentra en un continuo estado de recreación, se encuentra siempre frente a un interrogante. Esta dinámica debe ser entendida no solamente en base a una situación concreta en el pasado sino también en relación a las posibilidades de realidades alternativas en el futuro. Existe no solamente la identificación con un pasado sino también la identificación teológica con una utopía que puede ser realizada, corporizada en el futuro. En este campo nos encontramos nuevamente frente a la influencia decisiva de las distintas concepciones ideológicas sobre la identidad.
En el presente estudio nos detendremos en el problema de la identidad a través del tiempo a la luz de la polarización de la identidad judía en la época moderna.
En principio, las ideologías sionistas estaban de acuerdo con el esquema clásico de la continuidad de la historia judía pero las épocas distintas, fueron valoradas en forma selectiva. El sionismo estaba caracterizado básicamente por una actitud negativa hacia el exilio en contraposición a una actitud positiva hacia la época del Segundo Templo y especialmente a la del Primer Templo. Esta diferencia valorativa creó, a mi entender, también una identificación selectiva. En la conciencia histórica sionista todo pasaba, como si la conciencia histórica del pasado se hubiera extendido en dos planos. El uno se refería al territorio, a Eretz Israel, el segundo exilio.
El renacimiento sionista se vió como una vuelta hacia el pasado remoto hecho en base a una revolución y rebelión en contra del espacio galútico. Dos puntos claves expresaron la problemática de este esquema histórico: a) la falta de continuidad y la crisis, motivada por la reanudación del vínculo con la tierra; y b) la creación inicial de este vínculo con la tierra, es decir la colonización inicial de las tribus en la época de Josué, que constituía algo así como una especie de mito de transformación, de un primer período galútico simbolizado en la Torá, en el período idílico del Primer Templo. La preocupación literaria en esta época antigua, se convirtió, a mi entender, en un símbolo de la nueva problemática. La ideología sionista clásica, especialmente la laica, educó esencialmente, hacia una ruptura con el pasado cercano y un retorno hacia un espacio nuevo que no fue meramente geográfico, sino también ideológico y existencialista. Esta actitud positiva tuvo su expresión en las excavaciones arqueológicas y en los concursos bíblicos. Junto a la actitud afirmativa se habla de la negación de todo lo que se refería al galut y como resultante la creación de una especie de nueva actitud estereotipada hacia los continuadores de esa diáspora hoy en día, las comunidades judías en el mundo y los que le parecía ser una creación de la diáspora: la religión judía.
El capítulo de lo que se denomina en Israel "la conciencia judía" es un índice de la complejidad conflictual de ese esquema sionista de la historia y, como consecuencia de ello, de la profunda crisis que atraviesa la educación judía en el país. La necesidad de fomentar la conciencia judía, surgió cuando los educadores israelíes se apercibieron que basar la educación solamente sobre el polo nacional-estatal, implica una nueva peligrosa polarización. La conversión del polo territorial-geográfico en la base de la identidad judía renaciente tuvo consecuencias inmediatas en la forma de concebir la historia. La resultante de una educación basada en una definición territorial fue mucho más allá de lo que se había propuesto la concepción histórica sionista. En lugar de aquella concepción que hablaba de dos planos en sus relaciones dialécticas, la resultante de la educación sionista fue una concepción histórica totalmente linear, que cortaba completamente los lazos de unión étnica con el judaísmo de la diáspora.
Como hemos visto, este esquema representa específicamente las ideologías nacionales de muchos países nuevos, como los de América Latina, que fueron estructurados en base a migraciones distintas que se debieron amalgamar. Cuando uno de los historiadores oficiales en alguno de esos países tiene que definir su prehistoria, tiene que optar entre dos alternativas: la de recurrir a las fuentes de la colonización, es decir a la historia española, antes del descubrimiento de América, o a la de los indios, la población autóctona del lugar. La determinación de una línea histórica entre las dos alternativas es fundamental para la creación de una conciencia nacional en el futuro y una identidad a través del tiempo. Aquí la decisión no es empírica sino que ideológica y si traducimos el dilema a la que esta decisión se enfrenta a categorías israelíes, podemos decir, de que nos encontramos frente a la obligación de decidir quiénes fueron nuestros antepasados, los canaanitas o el judío galútico que se dirigió a Israel para transformar su vida.
El propósito de un estudio metodológico como el nuestro no es de hacer pronósticos. Esta abstención es una de las diferencias esenciales entre los estudios metodológicos y los estudios encuadrados en el marco de una determinada teoría; mas creo que es necesario resumir este párrafo con un análisis histórico basado en el estudio de las distintas teorías. Uno de los sistemas más aceptados es ver la transformación de la identidad judía como un proceso inevitable, histórico, que pasa de polo a polo, comenzando en el polo religioso y llegando al polo estatal a través del polo nacional. En esta concepción las polarizaciones se suceden unas a otras y se crean a través de la destrucción de las otras. Si esta concepción es verídica cabe pronosticar una creación final de una identidad judía estatal basada únicamente en la lengua y el territorio. Tal explicación y semejante pronóstico indudablemente no son objetivos y se encuentran basados a su vez en una concepción ideológica comprometida. La posibilidad de ver la situación final de esta evolución histórica indudablemente está aún abierta y la creación de una nueva identidad judía no es la única posibilidad.
Leo Strauss, el famoso estudioso de la filosofía judía, propone en el prefacio de su libro sobre la crítica spinozista de la religión una posibilidad opuesta. Según él, el estado judío soberano sin una cultura profundamente enraizada en tradiciones ancestrales, se convertiría en una mera cáscara. De ahí que la dinámica que se basa en el mero instinto de supervivencia la llevará a recurrir nuevamente al sionismo cultural y a las fuentes judías. Pero las fuentes judías basan su autoridad en la revelación divina, y por lo tanto en una segunda etapa nos encontraremos, de acuerdo a Strauss, con la renovada unión, con la tradición pero esta vez provista nuevamente de una autoridad religiosa, tal como existió antes de la transformación y la secularización de la que fuera objeto en la escuela del sionismo cultural Ajad Ha'amico. Es así como nos encontraremos en alguna etapa de nuestro desenvolvimiento frente a un resurgimiento de un nuevo sionismo religioso sin que su contenido implique de alguna manera un vínculo con lo que actualmente definimos con este término.
En determinadas oportunidades nos hemos referido en este estudio, en una forma explícita o implícita, al pensamiento de Eliezer Schweid, quien representa, a mi entender, el cambio anticipado por Strauss. Aún cuando este pensamiento se nutre en las fuentes de Ajad Haam y del sionismo cultural, se diferencia básicamente de ellos en la comprensión de la función del sionismo luego del establecimiento del Estado y especialmente en la interpretación de los elementos religiosos de la tradición judía que son aceptados aunque selectivamente, pero en forma tal que conservan su significado religioso original y esencial.
La diferencia entre el sionismo cultural nuevo y la posición original de Ajad Haam me parece fundamental y por lo tanto la crítica concluyente y demoledora de Kurzweil a Ajad Haam tal como fuera expresada en su colección de artículos "Nuestra nueva literatura, continuidad o revolución" no puede ser aplicada al pensamiento de Schweid. La vivencia religiosa, la fe religiosa no son consideradas ya como una mera transformación de otras fuerzas sino que pueden ser comprendidas en base a sí mismas. Leo Strauss ve el paso a este nuevo sionismo como del retorno de fidelidad ideológica hacia la fe judía. Usando el lenguaje de Strauss, el significado del estado es parcial y limitado, finito mientras que el cometido infinito de la redención nuevamente llegará a revivir como la corporización de la búsqueda de la solución a los problemas infinitos y absolutos a los cuales el hombre está sujeto. El redescubrimiento de este cometido como parte de nuestra identidad judía es indudablemente el redescubrimiento de la religión judía y es una de las opciones aún posibles a las cuales nuestro pensamiento se encuentra enfrentado.

D. EL POLO SOCIAL
El esquema que hemos esbozado hasta ahora está muy lejos de expresar la pluridimensionalidad del problema de la identidad y de las ideologías judías de nuestro tiempo. Falta en él especialmente un polo adicional que tuvo gran importancia en el desenvolvimiento del pensamiento nacional judío en la última centuria. Me refiero al polo social. Si agregamos este polo, nuestro triángulo se convierte en una pirámide, pero la mecánica general del tratamiento del problema no debe por ello cambiar. Nos encontramos frente a nuevas confrontaciones, esta vez alrededor de una nueva posibilidad de polarización que significa la posibilidad de la reducción de la esencia judía a meras categorías sociales.
El ejemplo clásico de esta polarización puede verse en la tesis según la cual los judíos no constituyen un pueblo sino una mera clase dentro de la sociedad. Esta tesis tuvo una importancia decisiva debido a las conclusiones políticas que se dedujeron de ella, una de las cuales fue la suposición de que en una sociedad sin clases y aún en una sociedad con cambios muy rápidos de clases, la existencia judía se convertiría en un simple vestigio del pasado. Cuando una tesis tal se expresa en los marcos de una teoría histórica determinista, ella implica que la asimilación es un hecho inevitable y necesario. La asimilación no es, por lo tanto, sino el tomar conciencia de un nuevo estado en el cual la entidad judía específica no existe más. Por ella la auto-identidad judía se convierte en una mera ilusión sin una condición real que la sustente.
Creo que es innecesario agregar que nos encontramos frente a una de aquellas profecías que tienen la característica de llevar a su propio autocumplimiento en el sentido de que los discípulos de los profetas son aquellos que las imponen generalmente por medio de la fuerza y la coerción. El pensamiento nacional tuvo que medirse con el cúmulo de estos problemas e insistir en la existencia autónoma de la entidad nacional al margen de las posibles entidades sociales. Un ejemplo clásico de este enfrentamiento se encuentra en los trabajos de Ber Borojov, que trata de explicar la existencia de una entidad nacional basándose en las categorías ideológicas del materialismo histórico. El trabajo de Borojov nos lleva a la necesidad de distinguir entre dos distintos conceptos que a pesar de ser muy parecidos no son idénticos: la anulación y la reducción. La anulación niega la existencia de un determinado fenómeno, mientras que en la reducción se niega su existencia autónoma y se lo trata de explicar en base a categorías distintas. Un fenómeno que pertenece a un determinado campo está siendo reducido cuando es explicado a través del uso exclusivo de términos y de reglas que pertenecen a otro campo, y en este sentido Borojov, entre otros, luchó en contra de la anulación de la existencia judía a través de su reducción a categorías sociales y económicas en el marco de otras ideologías.
Desde la revolución soviética el problema de las relaciones entre los problemas sociales y los políticos está en el orden del día de la política internacional. En esencia, nos encontraríamos frente a la necesidad de estudiar la otra arista de la nueva pirámide, la relación entre sociedad y estado. Es indudable que también aquí nos encontramos frente a contradicciones importantes, muchas de las cuales están muy relacionadas con la actitud de movimientos y estados identificados con la izquierda frente al Estado de Israel. Indudablemente existe una contradicción obvia entre la predilección política de estos movimientos por determinados estados cuyo régimen social no está muy de acuerdo con las concepciones sociales, que ellos consideran positivas.
En esencia, hemos visto dos problemas que se refieren a las relaciones generales entre problemas sociales por un lado y los problemas nacionales y políticos por el otro. Pero ésta pirámide puede ser considerada no solamente en su forma general, sino también en su forma concreta, en lo que se refiere a la identidad judía, tal como lo hemos señalado en los párrafos anteriores. Uno de los problemas básicos a los cuales se encuentra sujeta la educación ideológica israelí es la posible contradicción entre los problemas sociales y los problemas nacionales dentro de Israel. La posibilidad de contradicciones entre la estructura social y los intereses nacionales son producto de los cambios fundamentales originados por el sionismo que ha conducido al pueblo judío al establecimiento del Estado de Israel.
Daré un sólo ejemplo para que nos demos cuenta en qué forma la introducción de un cuarto polo cambia totalmente la estructura de nuestros problemas. El ejemplo es simple: la actitud hacia los olim. La existencia de correlaciones entre diferencias étnicas y diferencias económicas, nos llevan a nuevos problemas ideológicos y a la posibilidad de una polarización social que se expresa en el hecho de que puedan encontrarse israelíes que consideren la aliá como problemática para ellos en un sentido social a pesar de ser positiva e imprescindible para el Estado desde un aspecto nacional.
Una última observación sobre el nuevo diagrama ampliado. Entre todos los problemas, quiero señalar el hecho trágico que se observa especialmente en el pensamiento judío moderno, de la existencia de contradicciones entre el pensamiento social y el pensamiento religioso. El hecho de que el mejoramiento social haya sido unido en el siglo anterior a doctrinas del materialismo dialéctico es simplemente producto de lo que podemos llamar una casualidad histórica. La continuidad entre estos lazos trajo como consecuencia múltiples problemas que tuvieron su expresión de la identidad judía y erradas ideas sobre la imposibilidad de un pensamiento religioso que a la vez traiga soluciones a los problemas sociales. En este pensamiento, en esta unión y relación entre teorías metafísicas materialistas y teorías sociales, nos encontramos nuevamente frente a una nueva clase de problemas, representada por la arista sociedad y religión.

E. PROGRAMAS Y ARGUMENTOS
Nos hemos detenido anteriormente sobre la necesidad de la creación de un meta-lenguaje que permita la existencia de un campo neutral en el que se puedan estudiar las distintas concepciones ideológicas. Pero la creación de una terminología y de una sintaxis no es suficiente. En el mejor de los casos, podemos reformular las distintas posiciones. Pero no podremos argumentar en favor de alguna de estas posiciones.
Esencialmente, la pregunta debe formularse sobre la mera posibilidad de un estudio racional tal. ¿Existe acaso la posibilidad de argumentos racionales, de discusión racional en nuestro caso, especialmente tomando en consideración que es imposible, a mi entender, deducir normas en base a premisas que describen la situación actual del mundo?
Según la expresión favorita de los filósofos, es imposible deducir el Ought (debe ser) del Is (es). Es por ello que aún cuando aceptemos que alguna determinada teoría se encuentra más cercana a la verdad, es difícil ver en qué sentido son relevantes las metas que esta teoría pretende proponer. Cuando se deducen programas en base a teorías es casi siempre debido al hecho de que estas teorías no son sino planes de acción pragmáticos encubiertos en una forma pseudo-teórica y pseudo-científica. Creo que es imposible tratar de establecer cuáles son las condiciones suficientes para aceptar un determinado programa. Lo que creo es que, a pesar de todo, podemos hablar de dos condiciones necesarias para su aceptación, condiciones que son relevantes para nuestro estudio aquí. Uno de ellos es la posibilidad de su realización, es decir, un programa debe tener la posibilidad de ser llevado a cabo. De aquí podemos exigir de un programa que sea consistente, es decir, que esté libre de contradicciones internas.
La segunda condición es la exigencia de que el programa sea adecuado, es decir, que haya una adecuación entre los caminos y las metas que se ha propuesto. Esos criterios son solamente teóricos, pero en general es indudable que es muy difícil ponerse de acuerdo frente a las conclusiones reales de posibles caminos a tomar, o de posibles acciones que se puedan realizar. Estos criterios son indudablemente buenos para analizar post-factum la situación. Mucho más difícil es estudiarlos de antemano a pesar de lo cual es indudable que debates ideológicos existen y no nos podemos desentender de ellos. Estos hechos me parecen relevantes en lo que se refiere al estudio de las distintas concepciones o posiciones relativas a la identidad judía.
La mayoría de las concepciones que estudian la identidad judía no son meras teorías que describen situaciones. Ellas contienen programas que explican metas y caminos, de aquí que no se puede reducir la discusión de estos problemas a una discusión sobre hechos y su comprensión depende también de la comprensión de las distintas metas. Esto aumenta las dificultades en la comunicación entre las distintas posiciones, ya que el debate es posible solamente si logramos un acuerdo aunque fuese parcial.
Podemos a pesar de todo debatir tomando en cuenta los dos criterios que hemos señalado antes. El primero de ellos es el de que podemos acusar a una determinada ideología de falta de consistencia o de ser completamente irreal en la posibilidad de su aplicación. Por el otro lado, podemos también discutir tomando como punto de partida alguna meta común y preguntándonos si aquella teoría nos lleva a la posibilidad de realizar esta meta. Trataremos de explicar, de ilustrar este debate de los criterios, a través del análisis de los ensayos de polarización de los siglos anteriores. Así, por ejemplo, la posición que trata de definir al judío como perteneciente a la fe mosaica. Esa posición negaba totalmente la existencia de una unión cualquiera entre la religión y la nacionalidad. ¿Es esta posición verdadera? Este es un problema histórico. Desde un punto de vista ideológico ella significó algo mucho más importante, ya que no trató de formular una teoría sobre la historia pasada sino de fijar cánones para una evolución y cambios posteriores, actuales y futuros del pueblo judío; es decir que el debate actual sobre la realidad histórica del judaísmo como pueblo, como religión, en esencia era improcedente pues nos encontramos frente a una revolución, más exactamente frente a una reforma. Una respuesta teórica debía destacar el hecho que los argumentos reales o teóricos no pueden ser relevantes respecto al programa. Aún cuando existiese, de hecho una unión entre nacionalidad y religión, ésta podría ser eliminada, a través de una reforma, como efectivamente sucedió a través de la eliminación de las citas relativas a la creencia en el Mesías o a Sión. Esto también se expresó a través de una exégesis consistente de los textos. De lo único que podríamos acusar a una ideología tal es de la falta de adecuación a sus propias metas o de alguna inconsistencia en estas.
El más importante argumento que puede ser empleado en un debate ideológico en nuestro caso, creo que la actitud frente a la posibilidad de la conservación de la identidad judía cuando las mitzvot son cambiadas en forma tal que pierden todo sentido de identidad nacional. La falta de adecuación surgió a consecuencia del hecho de que la reforma fracasó en la selección de los preceptos religiosos y debió llegar al fin de su evolución a la eliminación total de este cuerpo de preceptos. Este hecho probaría que el vínculo entre la identidad religiosa y nacional no es una simple unión mecánica entre distintas partes y el mejor de los modelos que lo podría explicar sería el modelo de distintas dimensiones de los elementos. Una cosa parecida, creo, ocurre, cuando hablamos de los atributos nacionales, como por ejemplo el territorio. Es una amarga ironía de que en nombre de atributos territoriales y lingüístico se escuchen a veces argumentos en favor de la tercera polarización que trata de cambiar la esencia de la identidad judía.
Nuevamente aquí podemos utilizar el concepto de adecuación que exige un consenso mínimo en lo que se refiere a las metas. ¿Cuál es ese consenso? Creo que es doble. Por un lado, el asegurar el carácter judío del Estado y por el otro el conservar la unión de la entidad judía aún por encima de las diferencias geográficas e históricas. Si estos dos criterios son aceptados, nos permitirán poner un freno ante la posibilidad del surgimiento de una identidad israelí no-sionista y no-judía. Estas metas no pueden ser demostradas. Son condiciones previas a todo debate racional. El problema relevante central en las discusiones ideológicas que estamos dilucidando es el problema de la relación entre la identidad político-territorial y la identidad religiosa-nacional. Esta última identidad es importante como un componente de la existencia judía en el Estado de Israel, pero en lo que a la Diáspora se refiere es un componente exclusivo. ¿Es acaso posible considerar a esta entidad religiosa-nacional no estatal como una posible breirá (alternativa) frente a la realidad estatal? La mera formulación de este interrogante causa angustia, pero ésta no nos libera del deber de abordar el problema.
La identidad política fue durante generaciones una utopía. La identidad complementaria en la Diáspora, es hoy lamentablemente un mito. Esto es un hecho. El considerar este mito como una alternativa real, significa renunciar a la inmensa mayoría del pueblo, peligro real contra el cual debemos luchar.

F. LA SEPARACION DE LOS ROSTROS
Nuestra problemática encuentra una de sus más hermosas expresiones en las ideas del Rabino Abraham Itzjak Kuk, quién utiliza la agadá de la creación de la mujer tratando de iluminar a través de ella nuestra realidad actual.
De acuerdo al Talmud, motivo que luego fue muy utilizado en la Kabalá, el Adam Harishón, el primer hombre, el arquetipo, antes de que fuera creada Eva, era bisexual, tenía dos partzufim, dos rostros. Estos dos rostros fueron separados, creándose así el hombre y la mujer. Esto fue, indudablemente, - comenta el Rabino Kuk - una tragedia desde el punto de vista biológico, pero esta tragedia fue la fuente de una nueva creación, por encima de la mera unión biológica, la creación del amor. La separación de los rostros es la lucha entre lo que podemos llamar nuestras dos sub-identidades, la identificación religiosa por un lado y la nacional por el otro. Nos encontramos frente a una especie de un nuevo trauma original semejante a la separación del Adam Harishón, el hombre-mujer, separación que causa conflictos y confusiones en nuestra identidad. Mas, al lado de estos problemas nos encontramos frente a una nueva posibilidad, la de un diálogo entre identidades que se basa esta vez no en una mera unión empírica, sino en una nueva integración, consciente producto del amor entre identidades, problema con el cual debe medirse el pensamiento judío en nuestros días.
Tomado de : Dispersión y Unidad Número 18/19 - Reseñas y ensayos sobre los problemas contemporáneos del pueblo judío. Publicado por el Departamento de Organización e Información de la Organización Sionista Mundial, Jeruslén 1976. Págs. 5-20.
1 Prof. Shalom Rosenberg, director del Departamento de Filosofía Judía en la Universidad Hebrea de Jerusalén. Ver al respecto los importantes trabajos de Shimon Herman: American Students in Israel, Cornell Univ. Press, 1970. Ver asimismo: Israelis and Jews, Random House, N. York 1970; D.R. Miller, "The Study of Social Relationships, Situation, Identity and Social Interaction", Psychology: A study of a Science, ed. S. Koch. N. York, 1963
2 Humanismo hebreo, Edición Am Olam, pág. 130.
3 Sentencias (Piské Din), Tomo 16, 1962, pág 2492
4 Zhitlowsky cita como ejemplo al importante dirigente bundista, Vladimir Medem (1879-1923). Medem fue bautizado por su padre en su juventud como cristiano ortodoxo y Zhitlowsky lo consideró como un modelo del nuevo judío totalmente emancipado de su religión. Es indudable que este ejemplo es completamente arbitrario y absurdo, tanto bajo una definición halájica, como de acuerdo al concepto popular de lo que es la esencia judía.
5 S. E. Avner Nacionalismo Hebreo, "Alef" noviembre, diciembre 1950

Presencia Judia en La Filosofia

PRESENCIA JUDÍA EN LA FILOSOFÍA

Intentar describir la intervención de los judíos en el desarrollo de la filosofía es una tarea mayúscula. Quizá no tanto por su participación en la formación de escuelas filosóficas, lo que al parecer no constituyó un objetivo de su quehacer, sino por la cantidad de ellos que hicieron de esta disciplina o ciencia, si se la quiere así llamar, una preocupación central de sus vidas.Si bien la mayoría tiene como elemento inspirador o como tema de análisis aspectos de la religión o de la teología, no puede hablarse de la existencia de una Filosofía Judaica. Sin embargo, se denomina Filosofía Judía a los intentos que los judíos de diferentes épocas hicieron en orden a armonizar los postulados de su fe religiosa con las corrientes filosóficas prevalecientes en el entorno. Simultáneamente en no pocos casos, desde el terreno religioso más conservador, surgieron fuertes oposiciones a estas actividades.Los orígenes de esta filosofía Judía se remonta a la aparición de los primeros Profetas Bíblicos, si bien los expertos hablan de un pensamiento pre-filosófico reconociendo la posición pionera de los pensadores helenísticos. Posteriormente, aparece un mirar más evolucionado en, por ejemplo, el Libro de Job y en el Libro de la Sabiduría de Salomón.El aporte judío al debate filosófico es un fenómeno que no debe sorprender. Por el contrario, la motivación e incluso exigencia permanente al estudio e interpretación de las sagradas escrituras y a la búsqueda de la sabiduría, que no otra cosa es la filosofía, tan inherente al ser judío, tenía necesariamente que traducirse en una producción abundante de teorías, visiones, proposiciones, etc., debidamente sostenidas con argumentos de variada índole, tanto de la fe como de la razón.Un ejemplo inigualable de esta condición es la elaboración del Talmud que, además de constituir un monumento a la dialéctica, condensa el aporte de cientos de jajamin que durante tantos siglos vaciaron ahí parte de sus pensamientos. Otros ejemplos de obras igualmente trascendentes y reveladoras de las reflexiones de nuestros sabios son La Cábala y los múltiples escritos de los jasídicos , que representan grandes expresiones del misticismo hebreo. Desgraciadamente, las innumerables persecuciones que sufrieron los judíos en el transcurso de su historia conllevó, muchas veces la destrucción de sus escritos; por lo que nunca sabremos cuanto hemos, nosotros y la humanidad toda, perdido en esta materia.En cualquier caso, este trabajo no pretende ahondar en el contenido de la obra desarrollada por los filósofos judíos, cuestión que escapa a los tiempos y espacios disponibles y por sobre todo a la capacidad y conocimiento de este compilador que, en estricta justicia, debería hacer figurar entre comillas( " " ) la casi totalidad de este artículo, por provenir de transcripciones de diferentes autores.Por lo expuesto nos limitaremos a tratar de establecer la presencia de algunos de ellos en el pensamiento filosófico de todas las épocas, dejando para tratar con algo más de detenimiento en otra oprtundad a tres de ellos: Maimónides, Spinoza y Buber.
Recordemos que se enseña que el comienzo de la filosofía se ubica en Grecia hacia el siglo VI a.e.c., no obstante que hay testimonios anteriores de un pensamiento filosófico arcaico de la India, Egipto y Mesopotamia.La primera escuela sería la de Mileto y su fundador Tales (630-546 a.e.c.). Luego seguirían Pitágoras (580-500 a.e.c.) y posteriomente Heráclito de Efeso (550-480 a.e.c.) y Parménides (540-470 a.e.c.). Otros pensadores de este período son: Zenón, Empédocles, Anaxágoras, Protágoras y Gorgias. A continuación aparecen Sócrates(470-399 a.e.c.), Leucipo y Demócrito, Platón (428-347 a.e.c.) y Aristóteles (384-322 a.e.c.).Naturalmente, con posterioridad surgen otros filósofos dentro de la cultura griega, pero los nombrados integran posiblemente lo más clásico del pensamiento de dicha cultura.
Cuando la cultura indoeuropea (griegos y romanos) domina el mundo se hacen evidentes las diferencias con el judaísmo, aunque se influyen mutuamente. Veamos algunas de esas diferencias.
Indoeuropeos (griegos y romanos)
Judíos
Politeístas.
Monoteístas.
Zeus, hecho a imagen del ser humano, es el D’s supremo que mantiene el orden.
Es D’s el que crea a los hombres y elige a su pueblo.
Pintan imágenes y tallan esculturas de sus D’ses.
Tienen prohibidas imágenes y esculturas.
El mundo es eterno sin principio ni fin.
El mundo es creado, tiene principio y tendrá fin.
Visión cíclica del tiempo, un tiempo infinito, como una rueda o ciclo cuyos momentos se repiten.
Visión lineal del tiempo, que es finito. En esta visión histórica del tiempo hay momentos privilegiados.
Una antropología que habla de la transmigración de las almas.
Una antropología que habla del ser humano global, no sólo de las almas.
A menudo la materia es vista negativamente.
La materia forma parte del Universo, que es intrínsecamente bueno, ya que es obra de D’s.
La procreación no es enaltecida.
La procreación es un deber sagrado.
Indicaremos a continuación autores judíos que se destacaron en este quehacer, dejando constancia que algunos estudiosos señalan ya al pensamiento profético como el inicio de la manifestación judía en esta materia. Para mantener un cierto ordenamiento los citaremos de acuerdo con la secuencia histórica.
*Filón de Alejandría. (-25 a 50 e.c.)Se distingue por su intento de conciliar la Torá con el pensamiento filosófico griego, especialmente el platónico. Es pionero en el intento de conciliar la esfera del conocimiento con la de las creencias. Sostiene que el mundo ha sido formado por dos factores: D's, un ente completamente espiritual que es causa y origen de todo y una materia primordial creada por El. D's se comunica con sus criaturas por intermedio de fuerzas que emanan de El (logos).
Con Filón culmina lo que puede llamarse la Filosofía Judeo-Helenística, que se inicia hacia el siglo II a.e.c. entre los judíos greco parlantes de la diáspora, principalmente en el Egipto de los Ptolomeos. Cabe señalar que a este grupo pertenecían los que tradujeron la Biblia al griego en la versión conocida como "Septuaginta".Por casi nueve siglos, desde Filón hasta Saadia, no hay actividad filosófica expresa de judíos, salvo los aportes al Talmud .En la Edad Media, hacia el siglo IX, resurge la manifestación de pensadores judíos paralelamente con el renacimiento de la Filosofía Griega bajo los califatos abbásidas, donde se traducen al árabe las grandes obras de la Grecia Antigua. Esta tendencia es conocida como la versión judaica de la tradición Kalam .
*Isaac ben Salomón Israeli (c. 850 a 950 )Aunque es más conocido como médico. Este personaje nacido en Egipto que llegó a ser médico de la corte, escribió algunas obras filosóficas influyentes en su medio, entre las que se puede mencionar: Libro de Definiciones y Descripciones, Libro de los Elementos, Tratado sobre el Espíritu y el Alma, Libro de las Sustancias. Se reconocen en él influencias aristotélicas y neoplatónicas. Se le adjudica ser el iniciador de una era de Judaísmo Neoplatónico. A su vez, parece haber influido en la obra de Ibn Gabirol.
*Rabí Saadia ben Joseph ( 882 a 942 )También conocido como Said al-Fayyumi. Nacido en Egipto llegó a ser Gaón de la Academia Rabínica de Sura en Irak. Se lo consideraba el príncipe de los talmudistas de su época.Fue un prolífico escritor, sobre diversas materias, principalmente en idioma árabe.En el terreno de la filosofía escribe "Fe y Razón" (Emunot Vedeot), donde sostiene que razón y religión no se excluyen y trata de justificar la fe a través de la razón. Rechaza la religión sólo como una revelación divina, considerándola, además, sustentada en fundamentos racionales y lógicos. Otras obras son : Comentarios sobre "Sefer Yezira", "Libro de las Creencias y Convicciones" (Kitab al-Amanat w´a-I´tiqadat).Conocedor de Aristóteles, utiliza su argumentación para refutar los puntos de vista de Cristianos, Musulmanes, Brahmanes y Agnósticos.
*Samuel ben Hofni ( muerto en 1034 )Otro Gaón de Sura, con marcada influencia de la Tradición de Kalam, elabora una interpretación racional de la Biblia y ataca la creencia en la magia y la astrología..
*Moisés ibn Ezra (c. 1060 a 1139)Conocido principalmente por sus obras poéticas, se destacó también en el campo de la gramática, filosofía y comentarios de la Biblia.
Por otra parte se encuentran autores ligados a los círculos rabínicos, tales como:*Hai ben Sherira (939-1038).Fue Gaon (Director) de la Academia de Pumbedita, bajo cuya presidencia alcanzó su mayor desarrollo.Escribió cerca de 1.000 responsa. Se lo ubica en un terreno intermedio entre las escuelas filosóficas Racionalista y Fundamentalista, explicando que todos los antropomorfismos son metáforas y sosteniendo el Libre Albedrío frente a la Predeterminación. Acostumbraba a escribir las responsa en el mismo idioma en que se formulaban las preguntas(Hebreo, Arameo o Arabe).
*Nissim ben Jacob de Kairwan en Egipto (fines del s. X a comienzos del s. XI )Junto con Hai fueron destacados seguidores, en los círculos rabínicos , de la Tradición de Kalam.
Sin duda es en la Edad de Oro en España donde se aprecia la abundancia e influencia de los filósofos judíos. Entre ellos cabe destacar a los siguientes:
*Salomón Iben Gabirol - Avicebron. (1021-1058)Se lo considera el máximo exponente de la filosofía neoplatónica judía en España. Plantea que D's no puede tener contacto directo con sus criaturas debido a su carácter singular que escapa al entendimiento humano. De su unidad absoluta emanan fuerzas que se van alejando de la espiritualidad para llegar al mundo de la materia donde se desarrolla la existencia terrenal. La tarea del hombre es elevarse espiritualmente para acercarse a D's.Expuso doctrinas sobre la pluralidad de formas y de la presencia de la materia en criaturas espirituales en términos mucho más claros y definidos que como lo hizo San Agustín.Escribió " La Corona Real" (Keter Malkhut), "La Fuente de la Vida" (Mekor Jaim)
*Joseph ibn Saddik o Aben-Zadik ( muerto en 1149).Fue rabino de la ciudad de Córdoba. Se dice que, aunque anciano, murió no obstante de pena al presenciar el final de esa aljama a mano de los almorávides.En lo filosófico se lo considera un Neoplatónico, igualmente con influencia de Kalam.Autor de "Olam Katan" (Microcosmos)
*Bahya ben Joseph ibn Pakuda( s. XI)Escribió en árabe el "Libro de Introducción a los Deberes del Corazón" ( en hebreo Sefer Hobot ha-Lebabot), como un manual de vida interior en que plantea mandamientos morales y espirituales distintos a los de la mera observancia externa. La doctrina de Bahya está basada en parte en la ética neoplatónica y la ascética islámica Sufi, pero reflejando la tradición piadosa judía. Propicia el misticismo, caracterizado una completa indiferencia hacia el mundo, total abandono a D's, humildad y soledad.
*Abraham bar Hiyya Savasorda de Barcelona (se destaca hacia el año 1130)Se le reconoce más como matemático y astrónomo, pero es el primer filósofo judío del medioevo que escribe en Hebreo. En su "Meditación del Alma" (Hegyon ha-Nefesh), aunque adaptada a la doctrina neoplatónica, introduce una metafísica Aristotélica, acentuando el dualismo entre materia y forma.En otro de sus escritos "Megillat ha-Megalleh" ( Rollo del Revelador), dedicado a la revelación de la fecha y eventos ligados al futuro mesiánico, describe una doctrina metafísica en la que la tríada neoplatónica de Intelecto, Alma y Naturaleza se expande con la superposición de dos nuevos escenarios llamados los mundos de la luz y del dominio.Las enseñanzas de este sabio fueron utilizadas con posterioridad ampliamente por los cabalistas .
*Judá ben Samuel Halevi (Toledo 1085 - Tierra Santa 1140)Escritor, poeta, médico, filósofo y teólogo. Autor de las "Sionidas" y "Cuzary"Rechaza la filosofía platónica, pero no su ética. En la segunda de las obras citadas, escrita como un diálogo entre un teólogo judío y el rey de los "kazares", junto con considerar prescindible la filosofía argumentando que los problemas más importantes de la vida son inexplicables por esta, ubica la religión independiente de las ciencias. Sostiene que la religión se basa en tres pilares: en hechos históricos, en las tradiciones del pueblo y en vivencias espirituales. Esta obra constituye una fuerte crítica a la doctrina aristotélica.Entre otras cosas fue un fuerte opositor a la filosofía del célebre pensador musulmán Algazel (o al-Ghazali), quién atacaba la filosofía poniendo de manifiesto sus contradicciones internas y estableciendo la supremacía de los textos sagrados y dogmas racionalizados.
*Abraham ben Meir Aben Ezra.(1092-1167)Es un comentarista de la Biblia, astrónomo, gramático, poeta además filósofo. Nació en Tudela y recorrió varios de los países mediterráneos, tanto de Europa como de Africa y también Inglaterra.Introduce un neoplatonismo panteísta en sus comentarios a la Biblia: D's es Único, El es el Creador de Todo y El es Todo.
*Abraham ibn Daud. (1110-1180)Se lo consigna como el primer representante de la filosofía aristotélica en el judaísmo. Reconoció la interrelación entre la religión y la filosofía. Consideraba que el saber es obligatorio y que nadie debe tener aversión hacia la ciencia.
*Rabí Moisés ben Maimón - Maimónides (1135-1204)Fue el más grande filosofo judío del medioevo. Sigue los principios de Aristóteles.En su obra Guía de Descarriados (Moré Nevujim), sostiene la idea fundamental de que la fe pura y el pensamiento lógico coinciden perfectamente entre sí. Ambos reconocen que existe un solo D's del cual proviene la creación y ambos aspiran a elevar al hombre al más completo perfeccionamiento. La verdad de la fe y la verdad de la inteligencia no se contradicen una a la otra en los conceptos básicos. Eso significa que pueden andar juntas, si no llegan a la exageración.Sostenía que la filosofía y la teología coincidían a pesar de sus métodos diferentes. Cuestión que más tarde adoptó y desarrolló Santo Tomás Aquino.Plantea la teoría de que la inmortalidad consiste en el aporte al conocimiento. Más tarde Spinoza sostiene la misma tesis.La obra de Maimónides es tratada en otro artículo.
LOS AVERROISTAS
El filósofo musulmán Averroes (ibn Rushd) tuvo marcada influencia en varios pensadores judíos. El Averroísmo fue adoptado entusiastamente por muchos de ellos y adaptado de diversas maneras, extendiendo su campo sin limitarse a la mera repetición de los propios argumentos de Averroes. Al margen de la profundidad del pensamiento de Averroes y de su comprensión de Aristóteles, que era considerado el paradigma del pensador filosófico, estos fueron atraídos particularmente por el potencial que encontraron en el Averroísmo para resolver la delicada cuestión que enfrentaban acerca de la relación entre filosofía y religión. Vale decir, la idea de que ambas son verdaderas, aún cuando parecieran ofrecer respuestas distintas a las mismas preguntas.Fascinados por la idea Averroísta de que las súplicas u oraciones religiosas pueden ser interpretadas como expresiones populares de verdades filosóficas, ellos siguieron entusiastamente el plan de mostrar como traducir los postulados religiosos tradicionales en postulados filosóficos.Muchos de estos filósofos se vieron en dificultades cuya resolución les significó mucho dolor. Por ejemplo, como reconciliar aquello en que creían a través de la fe con aquello en que creían a través de la razón. El Averroismo parecía ser la solución a este problema, desde el momento que envolvía una teoría que explicaba como la fe y la razón están conectadas y hacían posible ser simultáneamente tanto religioso como racional. En consecuencia no es sorprendente que muchos pensadores Judíos fueran atraídos por esta doctrina filosófica, entre los que se puede citar además del ya nombrado Maimónides a los que se consignan a continuación:
*Samuel ben Judah ibn Tibbon (1150-1230)Médico y filósofo. Tradujo al hebreo la "Guía de Descarriados", como asimismo varias obras de Averroes que utilizó en su exégesis bíblica.
*Jacob Anatoli(s. XIII )Miembro de la comunidad judía de Narbona en el Languedoc, se desempeñó como físico, predicador y traductor del Árabe. Hizo amistad con el emperador Federico II.Escribió "Enseñanza de los Discípulos" (Malmad ha-Talmidim) y tradujo varios comentarios de Averroes a los trabajos de lógica aristotélica.
*Shemtov ben Joseph ibn Falaquera( 1225- 1295)Es un prolífico autor de tendencia neoplatónica. Es un seguidor de Averroes en su trabajo enciclopédico y comparte sus puntos de vista en su obra "Maestro del Maestro" (Moréh ha-Moréh), que es un comentario al trabajo de Maimónides, del que fue un ardoroso defensor frente a los ataques de los tradicionalistas.Otros libros: "Diálogo entre un Filósofo y un hombre Devoto", El Bálsamo de la Pena", " El Comienzo de la Sabiduría" (Reshit Hockmah), " Libro de los Grados" (Sefer ha-Maalot)
*Joseph ben Jacob Kaspi (1279-1340)Nació en la Provenza y escribió una variedad de trabajos teológicos y filosóficos.Al igual que el anterior es un comentarista de la obra de Maimónides, del que recibió una fuerte influencia, al igual que de Averroes y de Abraham ibn Ezra.Caspi defendió el sentido literal de muchos pasajes de las Escrituras como narraciones fidedignas de hechos pasados y criticó, como engañosos, muchos de los intentos de Maimónides de atribuirlos a alegorías proféticas. Por otro lado el compartía la actitud más bien ambivalente de Averroes respecto a los milagros, sugiriendo que hay una explicación natural de ellos, desde la que podemos entender todos los aspectos sobre el particular. Para entender el relato de un milagro parece que necesitamos entender el punto de vista y conocimiento de aquellos que estuvieron presentes en el momento. Las profecías también deben ser interpretadas en términos de la audiencia a la que se proponía influir y si hubiera aspectos del evento que no estamos dispuestos a aceptar totalmente, debiéramos ponerlos en perspectiva teniendo en cuenta la distancia de los hechos y nuestra relativa ignorancia de cómo el evento fue recibido en su tiempo. Los profetas están capacitados para decir lo que va a pasar en el futuro porque ellos son capaces de entender como las cosas que observan en el momento están encadenadas con lo que ha de venir. El papel de la deidad en este proceso es mas bien limitado. Muchos planteamientos religiosos no pueden ser considerados como hechos verdaderos; su función es motivar a las personas y enseñarles como comportarse. Cuando la profecía y la filosofía divergen debemos recordar que son diferentes y no sorprendernos porque en ocasiones no coincidan. Si realmente supiéramos porque los profetas dicen lo que dicen y porque los milagros toman la forma en que lo hacen, entonces podríamos entender como reconciliarlas; en realidad podríamos entender como las profecías son expresiones de verdades filosóficas popularmente accesibles. Como estamos limitados en el entendimiento de postulados religiosos, por la distancia desde su formulación original, debemos aceptarlos como aspectos de fe. Podemos, sin embargo, permanecer concientes que dichos planteamientos son equivalentes, en principio, a las verdades filosóficas.Al contrario de Maimónides y Averroes, Caspi siente poca simpatía con la postura de que los secretos de interpretación deben estar restringidos a una elite intelectual. Su parecer era que ellos debían permanecer secretos, debido a la imposibilidad actual de conocer con precisión que querían decir originalmente los antiguos postulados, dadas las diferencias de audiencia, lenguaje y contexto.
*Abba Mari ben Moisés ben Joseph de Montpellier.(s XIII y XIV)Rabino francés, nació en Lunel, cerca de Montpellier, hacia fines del siglo XIII. Posteriormente tomó el nombre de Astruc (Don Astruc o En Astruc, de Lunel). Mientras vivía en Montpellier se sintió muy afligido por la prevalencia del racionalismo Aristotélico el que, a través de los trabajos de Maimónides, amenazaba la autoridad de la Torá , la obediencia de los preceptos y la creencia en milagros y la revelación. Contra ello reacciona con una serie de cartas, coleccionadas posteriormente con el nombre de "Ofrendas Celosas" ( Mintah Kenaot), solicitadas por el famoso Rabino Salomón ben Adret de Barcelona para ayudar a la ortodoxia. Ben Adret, con la aprobación de otros eminentes Rabinos españoles, envió una carta a la comunidad de Monpellier proponiendo prohibir el estudio de filosofía a los menores de 30 años. A pesar de la oposición de los sectores más liberales, Ben Adret emitió un decreto en este sentido en el año 1305. El resultado fue un gran cisma entre los judíos de España y del sur de Francia, dándose un nuevo impulso al estudio de la filosofía por la interferencia no autorizada de los Rabinos españoles.
*Moisés de Narbona o Narboni (c 1300-c 1362)Nació en Perpignan. Escribió varios comentarios sobre textos religiosos y teológicos, conjuntamente con trabajos originales y comentarios sobre la obra de Averroes. Escribió extensamente sobre Maimónides, tendiendo a criticarle usando argumentos extraídos de Averroes, ya que fue uno de los pocos filósofos de ese tiempo en darse cuenta que Averroes estaba buscando desafiar la metafísica Neoplatónica de ibn Sina (Avicena), que constituía parte importante del pensamiento de Maimónides. Narboni desarrolló también la teoría del "intelecto activo" de Averroes, de tal manera de hacerlo relevante en la filosofía Judía.
*Isaac Albalag (s. XIV)Es el Averroísta más extremo de la filosofía judía medioeval, según se desprende de las notas que acompañaron su traducción al Hebreo de "Puntos de Vista de los Filósofos"(Maqasid al-falasifah) escrita por al-Ghazali, donde se propugna la doctrina de la "doble verdad". La verdad de las escrituras puede contradecir la verdad de la filosofía y es fútil intentar reconciliarlas.Albalag acepta el argumento de al-Ghazali de que hay ciertas doctrinas que deben ser aceptadas por la religión. Estas son: la existencia de castigos y recompensas por nuestras acciones, la supervivencia del alma después de la muerte del cuerpo y el hecho de la providencia, por medio de la cual D'os vela nuestros actos. En su libro "Estableciendo las Correctas Doctrinas" (Sefer Tikun ha-De'ot), reconoce que la filosofía en su forma Averroísta no se explaya sobre estas ideas religiosas y sugiere que ellas deben ser aceptadas por la gente común que no entiende filosofía. Tales ideas les permitirá alcanzar el mas alto nivel de bienestar de que son capaces, pero este debe ser comparado con la felicidad que los filósofos pueden lograr desde el momento que entienden mucho mejor la naturaleza de la realidad de lo que pueden hacerlo los creyentes ordinarios.A pesar de su racionalismo extremo, Albalag cree en un conocimiento intuitivo superior al pensamiento discursivo y contenido en profesías todavía impenetrables a la especulación exegética. Por lo tanto La Torá no puede servir como guía para resolver problemas de la metafísica.Un interesante paralelo a esta postura es presentada por algunos Cabalistas del siglo XIV que se enfrentaron al problema más complicado de reconciliar no sólo la filosofía con las Escrituras, sino que también con La Cábala.
*Rabi Levi ben Gerson - Ralbag o Gersónides (1288-1344)Es el más destacado Averroísta de la Edad Media y además de filósofo, fue un insigne astrónomo, matemático y comentarista de la Biblia. También se le conoce con los nombres de: León de Bagnolas, León Hebreo, Maestro León.Nacido en Bagnol, en el Languedoc, vivió en Avignon en el sur de Francia. En su obra "Combates del Señor" (Milhamot Adonai) coloca a la filosofía en un plano tan elevado como la revelación divina y se esfuerza por establecer para la religión un origen natural en lugar de sobrenatural. Discute la inmortalidad del alma, sueños, magia y profecía, los atributos de D's, la divina providencia, los cuerpos celestiales y el transportador principal, creación y milagros.En contraposición a Maimónides el afirma los atributos positivos de D's y la existencia de una materia primera como sustrato de la creación. Enseña que D's no tiene conocimiento del individuo como tal, sino que del orden universal de las cosas.Es un insigne conocedor de los comentarios de Averroes y se lo considera más imbuido del pensamiento de Aristóteles que Maimónides.Otra obra suya es "Teolioth", comentario de la Biblia. Además escribió una cantidad de libros sobre matemáticas, astronomía y artículos diversos sobre temas filosóficos.
* Kalonymus ben Kalonymus ben Meir de Arles (s. XIV)Miembro de una famosa familia judía distinguida desde el siglo VIII por su producción poética litúrgica, de estudiantes de Talmud y rabinos.Establecido en Francia, en la Provenza, es principalmente un traductor del Árabe. Comisionado por Roberto de Anjou, rey de Nápoles y sostenedor suyo, traduce al Latín el trabajo filosófico de Averroes y al Hebreo obras de al-Faradi, al-Kindi, Galen y otros.
*Hasdai ben Abraham Crescas (1340-1410)Atacó intensamente el pensamiento de Gersónides. En su libro "La Luz del Señor" (Or Adonai), uno de los escritos más profundos de la filosofía Judía medioeval, sostiene que Gersónides sólo logró incrementar los problemas que se había propuesto resolver.Se dice que su ataque a Gersónides es similar, en cierto sentido, al que Judah Haleví y Algazel hicieron del Aristotelismo.Sostiene que la máxima aspiración del hombre es la comunión con D's a través del amor y no del intelecto, y esto sólo puede lograrse únicamente siguiendo el camino de la ley revelada.
*Simón ben Zemah Duran(1361-1444)Es un continuador del discurso de Maimónides referente a los principios de la fe Judía. Reafirma tres dogmas esenciales: La existencia de D's, la revelación y la retribución.Obra principal: "El Escudo de los Padres" (Maguen Abot) .
*Joseph Albo(muerto en 1444)Discípulo del anterior, trata de armonizar las ideas de este con las de Maimónides.Su libro "Principios" (Ikkarim) es un clásico del dogma Judío.
*Isaac Abrabanel(1437-1508)Además de filósofo es estadista y comentador bíblico. Se le reconoce como el último pensador judío en suelo español, desde donde es expulsado en 1492 junto con sus correligionarios.Escribió un elaborado comentario sobre la Guía de Descarriados. Otro libro es "Obras del Señor"(Mifalot Elohim) en donde contradice la postura de Aristóteles y Averroes , sosteniendo el concepto de creación a partir de la nada.
*Abraham ben Shemtov Bibago(s XV)Escribe comentarios sobre Aristóteles , pero además es autor de "Camino de Fe" (Derek Emunah), que aborda la teología, la psicología y el dogmatismo desde el punto de vista de Maimónides.
*Judah Mecer Leon.(s. XV)Vive en Italia. Seguidor del Aristotelismo se orienta al nuevo humanismo, en cuyo espíritu escribe sobre retórica.
*Elijah Delmedigo (1460-1497)Enseñó a Pico della Mirándola e hizo clases en la Universidad de Padua, centrodel Averroísmo Cristiano.En su libro "Examen de la Religión"(Behinat ha-Dat) se refleja la influencia de la doctrina de la "doble verdad", pero es cuidadoso en no negar la posibilidad de interpretación filosófica de la religión.
*Judá ben Isaac Abrabanel- León Hebreo (h. 1460 - 1521)Aunque nacido en Lisboa, vive mayoritariamente en España, desde donde es expulsado en 1492.Trabaja en la línea Platónica en la Italia Renacentista. Una de sus obras más importantes es "Diálogos de Amor"(Dialoghi di Amore), que fue muy exitosa en su época. En ella exhibe una concepción grandiosa del universo, como un organismo animado por el amor y mostrando belleza y verdad. Es un buen exponente del esfuerzo por armonizar los puntos de vista aristotélicos, platónicos y mosaicos.Se dice que con León Hebreo se cierran más de 600 años de filosofía Judía de la Edad Media.
El siglo XVIII marca el inicio de lo que podemos llamar la filosofía Judía moderna, que presenta una visión diferente a partir de Descartes. Ya no busca armonizar revelación y razón como dos formas distintas de la verdad, sino que trata de delinear el significado de la religión dentro del marco más general de la razón humana o, posteriormente, como una actitud básica hacia la situación en que el hombre se encuentra asimismo.
*Baruj de Spinoza (1632-1677)Nace en Amsterdam en el seno de una familia de origen judeo-español.Fue un pensador perseguido a causa de sus ideas. Su visión de identificar a D's con la Naturaleza le valió el ser considerado como panteísta y fue expulsado de la comunidad que integraba. (Este pensador será materia de un artículo próximo)
*Israel Bal Shem Tov (1700-1760)Aunque personalmente no elaboró ideas filosóficas relevantes, el hecho de ser el fundador del Jasidismo le otorga méritos para ser considerado en esta lista.
*Moisés Mendelsohn (1729-1786)Plantea la inmortalidad del alma en su obra "Phaedon", mientras que en otra, "Jerusalén", sostiene que el judaísmo no exige de sus adeptos una fe ciega, sino la comprensión y el cumplimiento de las leyes morales e históricas.Está fuertemente influenciado por el clima intelectual del pensamiento racionalista alemán, del que es un exponente destacado. Basa su filosofía Judía en la distinción de Leibniz entre la verdad de los hechos y la verdad de la razón.Siguiendo una sugerencia formulada por Spinoza , restringe el significado de la revelación histórica a los ámbitos de la moralidad práctica y de la ley religiosa. El Judaísmo no sería una religión revelada sino una ley revelada.
*David Ricardo(1772-1823)Miembro de una familia judía de origen holandés, a los 21 años ingresa a la iglesia Unitaria y se casa con una Quáquera.Aunque es conocido mas que nada como economista, incluye en sus trabajos aspectos de filosofía social. Junto con Adam Smith son los más destacados representantes del liberalismo económico.Principales obras: "Principios de Economía Política y Tributación".
*Zacarías Fränkel. (1801-1875)Fundador de la escuela de Judaísmo Histórico Positivo.Se le reconoce principalmente por su papel en la creación de la corriente conservadora dentro del judaísmo y por su actividad como presidente del Seminario Teológico Judío de Breslau.
*Abraham Geiger (1810-1874)Uno de los fundadores del movimiento reformista. Enfatiza el carácter revolucionario de la religión judía.Cofundador y editor de "Escritos para una Teología Judía"(Zeitschrift für jüdische Theologie)
*Samson Rafael Hirsch (1808-1888)Fundador de la "Ortodoxia Separatista"(Trennungs- Ortodoxie), estudió filosofía en la Universidad de Bonn. El eslogan del movimiento era: Torá combinada con sabiduría mundana.Hirsch presenta al Judaísmo como una comunidad basada en la fe, aspirando a la santificación de la vida, a la espiritualización del hombre y a tomar conciencia de la divina providencia en la tierra.
*Moritz Lazarus (1824-1903)Estudió leyes y filosofía en Berlín y más tarde enseñó en Berna y en el propio Berlín en la Kriegsakademie y en su Universidad .El principio fundamental de su filosofía es que la verdad debe ser buscada no en abstracciones metafísicas o apriorísticas, sino que en la investigación psicológica y, más aún, que dicha investigación no se puede confinar exitosamente así misma a la conciencia individual, sino que debe ser dedicada primariamente a la sociedad en su conjunto.Elaboró científicamente los principios de la ética judía, considerando que es una ética religiosa y por consiguiente no necesariamente debe tener explicación racional.Interpreta el Judaísmo como un sistema de ética autónoma a la luz del imperativo categórico de Kant.Su principal obra filosófica es "La Vida del Alma"(Das Leben der Seele)
*Salomón Formstecher (1808-1889) y Samuel Hirsh (1815-1889)Inspirados en los movimientos idealistas del siglo XIX, reconstruyen los sistemas de Schelling y Hegel, respectivamente, en orden a establecer el verdadero significado del Judaísmo dentro del proceso dialéctico de la historia.Sostienen que el viejo conflicto entre razón y revelación es disuelto, no por armonización lógica, sino que por el concepto de desarrollo histórico.
*Salomón Steinheim(1789-1866)Plantea una visión totalmente opuesta a la anterior. Afirma que la verdad religiosa pertenece sólo a la revelación. Las enseñanzas de la revelación son incompatibles con -e irreducibles a -la razón ; y la última debe sacrificarse para dejar paso a la primera.
*Karl Heinrich Marx (1818-1883)Nació judío en el seno de una familia de larga tradición rabínica. Cuando tenía 6 años su padre se convirtió al Cristianismo y toda la familia fue bautizada como Protestantes.Ha sido el filósofo del siglo XIX de mayor repercusión en ámbitos como el social, el político y el económico.La gran motivación filosófica de Marx tuvo un carácter práctico: transformar la sociedad, limar las desigualdades y suprimir las injusticias.Recibió influencias de Hegel y Feuerbach, especialmente en lo relativo a la visión materialista y al concepto de alienación. Lo primero se traduce en la defensa de que no son las ideologías las que determinan una realidad concreta sino que, por el contrario, es la realidad material la que produce su propia ideología. En otras palabras, no es el espíritu, en su desarrollo, lo que construye la realidad y determina la historia, sino que son las condiciones concretas, sociales y económicas las que marcan la forma de pensar y la cosmovisión de un pueblo.En cuanto a la alienación, sostenía que se producía básicamente en el ámbito del trabajo, donde unos hombres eran explotados por otros. Se produce alienación cuando el trabajador no se siente reconocido ni valorado, ni siente que aquello que realiza sea realmente suyo. Así pues, se da en un doble nivel: respecto al producto del trabajo y respecto al acto mismo de trabajar. La alienación económica deriva, según Marx, en la alienación social y religiosa.Obras: Fue un prolífico escritor, algunos de sus trabajos más conocidos son:"El Capital", "El Manifiesto Comunista"(en conjunto con F. Engels), "Manuscritos Económico-Filosóficos". "Miseria de la Filosofía."
*Teodoro Herzl (1860-1904)Al igual que Shem Tov no es un filósofo, pero en su calidad de padre del sionismo abre una manera diferente de ver y enfocar la vida judía moderna , influyendo sin duda en el pensamiento filosófico que lo sucede.
En el siglo XX se abandona, en general, el esfuerzo por interpretar el Judaísmo como la religión de la razón por excelencia. Se orienta a una interpretación existencialista de la religión, como rebelión ante la identificación idealista de revelación y razón y, especialmente, contra la armonización medieval de las verdades religiosa y filosófica.
*Hermann Cohen (1842-1918)Filósofo judeo-alemán, fundador de la escuela Marburg de Neo Kantianismo.Enmarcada en las normas de la filosofía kantiana postula unas filosofía, lógica, ética y estética judías. En ellas D's se revela por intermedio de sus exigencias morales y es el profeta judío el que las comprende de la mejor manera.Al ideal mesiánico del Judaísmo le da una expresión filosófica: la idea de D's crea el concepto de historia humana como un campo para el desarrollo del propósito de D's que es la unificación de toda la humanidad bajo la ley de la moralidad. En su libro "La Religión la Razón de los Orígenes del Judaísmo(Die Religión der Vernunft aus den Quellen des Judentums), reconociendo que los conceptos de humanidad e historia universal son insuficientes para dar significado a la existencia individual del hombre, rompe el círculo mágico de su filosofía idealista encontrando el significado de la religión, no en la idea universal de la moralidad, sino en la correlación personal entre D's y el alma individual.En contraposición a Hegel, que había hecho de la ética una parte de su metafísica panlogística, enfatiza la diferencia esencial entre lo moral y lo ontológico.Su obra mayor está constituída por las tres partes que forman su sistema filosófico: "Lógica: el sólo entendimiento; Ética: las solas voluntades; Estética: las solas sensaciones. (Logik der reinen Erkenntnis, Ethik des reinen Willens, Ästhetik des reinen Gefühls)
*Aarón David Gordon (1856-1922)Sostiene que la redención del individuo judío sólo puede gestarse en la simbiosis inseparable de trabajo y naturaleza.
*Ajad Haam (1856-1927)Formuló la filosofía del sionismo cultural, con Eretz Israel como centro espiritual del pueblo judío, de donde se irradiarían nuevas energías vitales hacia la diáspora.
*Moritz Schlick (1882-1936)Líder del grupo de Neopositivistas que formaron el Círculo de Viena. Estudió física en Lausana, Heidelberg y Berlín, donde fue alumno de Max Planck. Obtuvo su doctorado en filosofía con una tesis sobre física.El Círculo de Viena se caracterizó por su hostilidad a la metafísica, por un empiricismo radical, por su fé en las técnicas de moderna lógica simbólica y por su creencia de que el futuro de la filosofía estaba depositado en su ingreso a la lógica de la ciencia.En su primera época Schlick fue influido por Kant, pero creía que los descubrimientos de la física moderna, que él fue uno de los primeros en interpretar filosóficamente, mostraban que los puntos de vista de Kant sobre el espacio, el tiempo y la causalidad eran insostenibles. También recurrió a la física moderna para apoyar el principio fundamental de la lógica positivista de que el significado de cualquier planteamiento depende totalmente de la posibilidad de su verificación empírica. Es a partir de este principio que llega a la conclusión de que los postulados metafísicos no tenían sentido.En síntesis sostiene que el filósofo no debe tratar de competir con el científico. El objeto de la filosofía no sería establecer un cuerpo de proposiciones filosóficas, sino aclarar otras propuestas.
*Sigmund Freud (1856-1939)Su obra constituye una de las aportaciones modernas más relevantes para la comprensión de la naturaleza humana.Conjuntamente con Marx - que también podría formar parte de este listado- y Nietzsche , se los considera filósofos de la sospecha. A pesar de las diferencias, comparten una actitud similar de duda y denuncia hacia el verdadero y auténtico sentido de la cultura, la sociedad, la ciencia y la religión.
*Ludwig Wittgenstein.(1889-1951)Aunque bautizado, junto con sus hermanos, en la fe católica, proviene de una familia judía.Acepta y desarrolla la concepción de Bertrand Russell conocida como Atomismo Lógico, adoptando el nombre de Positivismo Lógico.Contribuye a la formación del Círculo de Viena, escuela filosófica que se desenvuelve en el marco del Positivismo y dela que formaron parte varios otros pensadores judíos.Aspectos característicos de la Escuela de Viena son: La Filosofía como crítica del lenguaje, La Doctrina de la Tautología, El Principio de Verificación, Forma y Contenido, Protocolo-Declaraciones, Fisicalismo, La Vista Emotiva de la Expresión Ética.Principales obras: "Tractatus Lógico-Philosoficus". "Investigaciones filosóficas".
*Leo Baeck (1873-1956)Presenta el judaísmo como una polaridad dialéctica entre mitzvá y misterio, en que el misterio divino a veces desplaza la halajá. Es portador del concepto del monoteísmo ético, por lo tanto desde su punto de vista, por ejemplo, piedad es cumplir con las obligaciones entre hombre y hombre.
*Franz Rosenzweig(1886-1929)Junto con Buber propugna el "nuevo pensamiento", centrado en la relación Yo-Tu, con el énfasis puesto en la respuesta y en la acción más que en la contemplación. Este existencialismo no es un intento por hacer de la existencia del hombre la medida de todas las cosas. En lugar de ello, asume la tarea de interpretar las relaciones entre D's, el hombre y el mundo.Escribió La Estrella de Redención ( Der Stern der Erlösung )
*Martin Buber (1878-1965)Se dice que su pensamiento filosófico es el pensamiento del diálogo y de la comunicación.Plantea la posición del hombre frente a D's como una experiencia íntima y frente a la realidad como una suma de experiencias racionales y empíricas. En síntesis su temática es la de la relación.(Este pensador será materia de un artículo próximo)
*Abraham Joshua Heschel (1907-1972)Plantea que en la religión no debe buscarse la razón ni analizar las experiencias religiosas, sino percibir la realidad y establecerla como una relación viva y dinámica entre D's y el hombre.
*Mordejai Kaplán (1881-1983)Concibe el judaísmo como una civilización en evolución permanente. Es por lo tanto más que una religión. Es la suma de todas las manifestaciones de la vida individual y colectiva del ente judío que conscientemente quiere pertenecer a ese pueblo. Por ello les son comunes, además de la religión, una cultura, tradición, costumbres, idioma, arte ,moral, amor a la Tierra de Israel y compromiso con su Estado.
Independientemente de la opinión que nos merezcan sus opciones religiosas, es necesario dejar constancia del importante aporte que hicieron los siguientes pensadores contemporáneos, todos ellos de origen judío:
*Edmund Husserl (1859-1938)Elaboró un método filosófico que mostraba el camino para saltar de la vivencia individual a su formulación filosófica.La fenomenología es un método para llegar a captar la esencia de los fenómenos y, también, una forma de ver y entender la realidad.Tuvo gran influencia en los existencialistas, especialmente Heidegger y Sartre.
*Henri Bergson(1859-1941)De familia judeo-irlandesa, pero nacido en Francia, Bergson fue un personaje de prestigio universal en diferentes ámbitos. En literatura fue distinguido con el Premio Nobel 1927.Su sistema filosófico se basa en el análisis de los fenómenos de la conciencia por medio de la intuición. La idea destacada de su pensamiento es que, al contrario de lo que sostenía la filosofía tradicional, en cuanto el tiempo es una ilusión y lo finito una eternidad, el planteaba que " yo soy una cosa que dura". Al sustituir lo duradero por valores no temporales el reemplaza los valores estáticos por valores de movimiento y cambio. Todo el trabajo de Bergson tiene que ver con duración y movimiento; no actúa por especulación general.Algunos de sus trabajos destacados son: "Ensayos sobre los datos inmediatos de la conciencia " (Essai sur les dones inmediatez de la conscience), "La evolución creadora" (L'Évolution créatrice), "Las dos fuentes de la moral y la religión"(Les Deux Sources de la moral et de la religión), "Materia y Memoria"(Matiére et Mémoire).
*Max Scheler(1874-1928)Enseña Filosofia en la ciudad de Colonia. Se considera su método como fenomenológico, es decir, trata de descubrir que es lo que está esencialmente comprometido en las actitudes mentales y sus objetivos.Entre sus obras se cuentan: "Naturaleza de la Simpatía"(Wesen und Formen der Sympathie), "De lo Eterno en los Hombres"(Vom Ewigen in Menschen).
*Erich Fromm(1900-1980)Nació en Frankfurt, Alemania, en el seno de una familia muy religiosa de judíos ortodoxos. No obstante el llegó a ser lo que llamó un ateo místico.Se doctoró en Heidelberg como sicoterapista y emigró a USA en 1934.Sus biógrafos sugieren que la teoría de Fromm es una rara mezcla de Freud y Marx. El primero postula que nuestros caracteres son determinados por la biología (inconciente, estímulos biológicos, represión). Marx, por otra parte, ve a la gente determinada por la sociedad y , más específicamente, por sus sistemas económicos. A esta mezcla de dos sistemas deterministicos agrega algo bastante ajeno a ellos: la idea de libertad. Esta permite a la gente trascender el determinismo que Freud y Marx le atribuye. En efecto, Fromm hace a la libertad la principal característica de la naturaleza humana.Dice que la libertad es algo difícil de obtener y, sin embargo, cuando la tenemos tendemos a alejarnos de ella. Fromm describe tres formas en que nos escapamos de la libertad: El Autoritarismo, La Destrucción y La Conformidad Autómata.Obras: "Escape de la Libertad", "Hombre para si mismo", "El Arte de Amar", "La Sociedad Sana","Anatomía de la Destructividad Humana",etc.
*Karl Raimund Popper (1902-1994)Nacido en Viena, es uno de los filósofos de la ciencia más importantes del siglo XX, interesándose por la naturaleza de esta y su proceso evolutivo.Muy joven fue impactado por las escenas de extrema pobreza que le tocó observar, lo que lo llevó a participar a los 15 años de edad en un movimiento socialista estudiantil. No obstante, posteriormente adoptó una actitud crítica frente al marxismo, la que se hace presente en su libro "La Sociedad Abierta y sus Enemigos", donde también arremete contra Platón y Hegel; a todos ellos los califica como profetas de sociedades cerradas . No acepta que consideraciones sociales y políticas tengan que subordinarse al principio de igualdad, porque ello involucraba ,entre otras cosas, a renunciar a otros derechos individuales como la libertad.Fue profundamente influido por Albert Einstein, en quien apreciaba la auténtica actitud científica, no dogmática y conciente de la posibilidad de error. Con ese espíritu se interesa en cuestiones de filosofía de la ciencia y cuestiones sociopolíticas.Se destacó como acérrimo luchador contra los totalitarismos, especialmente el nacista, responsable del exterminio masivo de judíos.Después de la guerra se establece en Londres, enseñando lógica y metodología científica en la London School of Economics.
*Isaiah Berlin (1909-1997)Insigne filósofo e historiador de las ideas es considerado un personaje destacado del siglo XX. Nació en Riga, Letonia, hijo de un exitoso comerciante en maderas y terrateniente. Nieto, por la línea materna, de un rabino Jasídico de la tradición Lubavitch. Su familia se trasladó a San Petersburgo, donde fue testigo presencial de la Revolución Rusa. Emigraron a Inglaterra en 1921.Recibió una educación religiosa, pero no se sintió atraído por ella. Opinaba que el Talmud era un libro "muy, muy aburrido". Fue un ardiente sionista.Enseñó filosofía en Oxford y durante la 2ª Guerra Mundial desempeñó misiones en EE.UU. para el Servicio Británico de Información. Al término de la guerra fue asignado a la Embajada Británica en Moscú. Al volver a Oxford había perdido interés en el tipo de filosofía analítica que lo había preocupado en los años 30. Para él la filosofía parecía haberse convertido en algo estéril, desconectada de la historia y de las vidas humanas. Es así, que derivó hacia el estudio de las ideas sociales y políticas. Siguió enseñando en Oxford y también en Londres y Washington y en las Universidades de Harvard, Princeton y Chicago.Se dice que sus clases y ensayos son una cornucopia del pensamiento político y filosófico occidental, conteniendo indagaciones acerca de la naturaleza de la libertad, la búsqueda de Utopía, el falso concepto del Iluminismo, la búsqueda innata del ser humano de una patria, las raíces del nacionalismo, las bases del facismo, etc.Para él, las ideas no podían separarse de las personas y de su entorno sicológico y cultural. Tampoco eran meras abstracciones, sino que vivían en las mentes de las personas, inspirándolas, formando sus vidas, influyendo sus acciones y cambiando el curso de la historia.Fue designado Caballero y condecorado con la Orden al Mérito, la más alta distinción Británica por aporte intelectual. También fue Presidente de la Academia Británica.Obras: "El Puercoespín y el Zorro", "Dos Conceptos de Libertad", "Impresiones Personales" , "Pensadores Rusos", "Conceptos y Categorías", "Contra la Corriente", "La Torcida Madera de la Historia"," Karl Marx", "Cuatro Ensayos sobre Libertad", etc.
*Claude Lévy-Strauss (1908-Nacido en Bélgica, es miembro de una familia de intelectuales Judeo-francesa. Estudió en la Universidad de París y, a su vez, enseñó en la Universidad de Sao Paulo, en la New School for Social Research, en la Ecole Practique des Hautes Etudes y en el College de France.Aunque estudió Filosofía, al igual que Leyes, no fue especialmente atraído por esa disciplina, prefiriendo la Antropología.Adquirió mucha popularidad por su rehazo a la historia y al humanismo y su negativa a aceptar la civilización occidental como privilegiada y única. Sostiene que la mente salvaje es igual a la mente civilizadaCreador de la Antropología Estructural.Obras: "Antropología Estructural", "El Pensamiento Salvaje", "Las Estructuras Elementales del Parentesco", "Mitológicas", "Palabra Dada", " Lo Crudo y lo Cocido"
*Giles Lipovetsky( 1944-)Es uno de los pensadores posmodernos que afirman que las conquistas de la modernidad han implicado un precio excesivamente alto, con efectos no deseados en el hombre y en el medio ambiente. Sostienen una visión negativa de la historia y del progreso.Esta corriente, más que representar una filosofía o proyecto alternativo, es mas bien una actitud que asume la debilidad de la razón ante las grandes cuestiones que se plantean al ser humano. Aceptan la existencia de una pluralidad de pensamientos pero que, a su juicio, son incapaces de fomentar valores e ideales.Las lógicas económicas y culturales del universo individualista conducirían ineluctablemente a la guerra de todos contra todos, al cinismo, al egoísmo generalizado, a la degradación delas relaciones sociales. En resumen a una sociedad sin alma, sin fin y sin sentimientos.Lipovetsky reivindica el papel de la escuela como integrador social. Declara que la justicia social en una democracia no puede satisfacerse con convertir a los hombres en asistidos sociales: se debe dar sentido y consistencia a la idea que todos tienen derecho a participar en la sociedad, se útiles a la sociedad. Para ello, a la escuela se le deben imponer obligaciones, volviendo a centrarse en la adquisición de los aprendizajes fundamentales necesarios para toda vida profesional y social, para toda integración en las sociedades postindustriales.
A MODO DE EPÍLOGO.
Toda obra tiene su término, voluntario o involuntario, aún quedando inconclusa. En este caso voluntariamente se decidió ponerle fin porque, al tratarse inicialmente de una contribución puntual para una revista de temática variada se corría el riesgo de exceder la extensión aceptable, aún cuando nunca se pretendió cubrir exhaustivamente la nómina de filósofos judíos. Posteriormente, al decidirse su publicación como material de apoyo a los alumnos de Etz Jaim, se incorporaron mayor cantidad de personajes, aunque subsistía el temor de que resultara igualmente demasiado dilatada y además indebidamente estructurada como elemento de estudio. Debe advertirse que esto se hizo a sabiendas de que quedaron muchos personajes excluidos - como los que se mencionan más adelante - y con la sensación de que por ignorancia se han omitido muchos otros o, que por el contrario, se incluyeron algunos que tenían insuficientes méritos para figurar en esta selección. No obstante, nos queda la esperanza de que algún lector se motive para completar, complementar y/o corregir lo aquí expuesto.Entre los pensadores marginados están:Isaac ben Shemtov, Hillel ben Samuel de Verona, Baruj ibn Yaish, Moisés ha-Kohen ibn Crispin, Elijah ben Eliécer de Creta, Isaac Shealtiel Hen de Barcelona, Salomón Petit, Emmanuel Levinas, Noam Schomsky, Paul Landsberg, Max Picard, Adolf Reinach, , Morris Cohen, Jaime Barylko.
BIBLIOGRAFÍA.
Manual de Historia Judía. -Simón Dubnow.
Enciclopedia Británica.
Enciclopedia Salvat.
Historia Social, Política y Religiosa de los Judíos de España y Portugal.-José Amador de los Ríos.
Ciclo de Conferencias sobre Desarrollo del Pensamiento Filosófico Judío.-Nelson Pilosof.
Que es el Judaísmo.-Esteban Veghazi.
Fe y Razón.-Pinchas Brener.
Historia de los Judíos.-Paul Jonson.
La Cábala.-Alexandre Safran.
El Jasidismo.-Beatriz Borovich.
Guía de Descarriados.- Maimónides
Historia de la Filosofía.-L. Vallmejó Riera.